A pesar de que no hay evidencia científica suficiente para recomendarla, la titular del Ministerio de Salud, Pilar Mazzetti, dejó a criterio de médicos y pacientes la administración de ivermectina para tratar la Covid-19.
Mazzetti reconoció que la ivermectina es un fármaco antiparasitario y, para defender su uso en casos de nuevo coronavirus, hizo referencia a estudios in vitro, uno de los niveles más bajos de evidencia científica.
"La ivermectina es un fármaco de utilización conocida para acarosis y otro tipo de parásitos, tiene una administración fácil con efectos secundarios manejables. Al inicio de la pandemia, algunos estudios científicos en células señalaron que disminuye la cantidad de virus en células", dijo en conferencia de prensa.
"Algunos trabajos en humanos indicaron lo mismo, el uso de la ivermectina es contradictorio, algunos estudios dicen que no, otros que sí", agregó la ministra.
Sin embargo, la ministra Mazzetti reconoció que no hay evidencia científica suficiente para que las autoridades hagan tal recomendación.
"Los organismos internacionales han indicado que todavía no hay evidencia suficiente para indicarlo ampliamente", dijo Mazzetti.
Lo que hay, recalcó la ministra, es la posibilidad de que el médico, tomando en cuenta síntomas e historia clínica, de al paciente y ambos decidan probar.
"Existe la potestad de parte del médico para dar un fármaco para una indicación particular. Los ciudadanos deben ser cuidadosos de preguntarle al médico que tiene adelante, depende del caso, se pueda utilizar. Se deja a criterio del médico", dijo la ministra.
"La ivermectina debe ser recetada, los ciudadanos deben tener una prescripción médica para el uso racional de los medicamentos", señaló.
"Tiene pocos efectos secundarios, pero hay y los problemas se deben respetar", dijo.
¿Qué dicen los estudios científicos?
En Australia, se hizo un estudio in vitro de ivermectina para Covid-19 y no se llegó a probar su efectividad en humanos, ya que se alertó que la dosis en humanos sería hasta 50 y 100 veces más de lo usual, lo que elevaría el grado de toxicidad de la droga. Este tipo de estudios es uno de los niveles más bajos de evidencia.
Entre abril y octubre del 2020, se publicaron los resultados de los ensayos clínicos aleatorizados de la Universidad de Virginia (UVA), el ensayo clínico Recovery, el estudio Discovery (OMS) y el ensayo Solidarity. Ninguno de ellos encontró que exista alguna droga efectiva para tratar la Covid-19 y advirtió que hubo mayor riesgo de muerte en los que tomaron fármacos como hidroxicloroquina.
En Perú, el Instituto de Evaluación de Tecnologías en Salud e Investigación (IETSI), una institución de EsSalud, realizó un estudio de cohortes retrospectivo que tomó en cuenta confusores y pudo hacer una emulación de un ensayo clínico aleatorizado. Las conclusiones de este estudio fueron que ivermectina, hidroxicloroquina y azitromicina no son beneficios para los pacientes, ya que no influyó en las muertes, ingresos a UCI ni requerimiento de oxígeno.
Por su parte, el pasado 14 de enero, el National Institutes of Health de EEUU (NIH) ha incluido a la ivermectina como parte de su guía para tratar al Covid-19. Sin embargo, la institución precisó que esto es basado en estudios in vitro y que las pruebas en humanos tienen errores. Hacen falta ensayos clínicos aleatorizados de calidad.
Millones de soles en compras
Mientras IETSI advertía que las drogas que compra el Estado peruano para tratar la covid no funcionaban, EsSalud hacía caso omiso y realizó compras de fármacos. A inicios de junio del 2020, el Ministerio de Salud (Minsa) compró 490,000 tratamientos de ivermectina. Según información del Organismo Supervisor de las Contrataciones del Estado (OSCE), el pasado 5 de octubre del 2020, EsSalud compró a la Droguería Sagitario 980,000 frascos de ivermectina por un precio total de 4 millones 782 mil 400 soles.
Además, el Centro Nacional de Abastecimiento de Recursos Estratégicos en Salud (Cenares) ha gastado un total de 19 millones 848 mil soles en 2 millones 300 mil dosis de ivermectina.
La ivermectina no es inofensiva
Entre las reacciones adversas de la ivermectina probadas por los ensayos clínicos con los que se aprobó como medicamento antiparasitario, resaltan: astenia y fatiga, dolor abdominal, anorexia, constipación, diarrea, náusea y vómito; somnolencia, vértigo y urticaria.
[Foto de portada: PCM Perú / Flickr]
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