El titular del Ministerio Público, Pedro Chávarry, negó que haya intercedido o que pretenda hacerlo ante algún fiscal con el fin de buscar "favorecer o perjudicar" a algún partido político o a alguna persona, luego de que su colega José Domingo Pérez Gómez lo puso en evidencia, al denunciar que es hostigado por su propia institución con temas familiares y restándole personal en su despacho.
Aludía a que ha sido conminado por otro fiscal para que explique la contratación de su esposa en el MEF, así como sus palabras sobre la época de terrorismo en el Perú en un foro académico en el extranjero y la salida de su colega Érika Delgado, que lo venía apoyando en sus investigaciones, sin que se le consulte al respecto. Y detrás de todo esto estaría Chávarry, según dejó entrever; ello sin tener en cuenta el proyecto con el que el fiscal de la Nación se quiere volver omnipotente.
Este miércoles, en la audiencia en que sustentó el pedido de prisión preventiva de 36 meses para Keiko Fujimori, el fiscal Pérez explicó que una de las estrategias de la organización criminal que se había estructurado en Fuerza Popular, según sus pesquisas y la declaración de un testigo protegido, era la de tomar el control Poder Judicial y el Ministerio Público.
Pérez gómez en la audiencia en la que puso al descubierto las maniobras de Chávarry para hostigarlo. (Andina)
Por ello–explicó el magistrado– el fujimorismo necesitaba proteger a Chávarry y evitar su destitución en el Congreso, como en efecto pasó, tesis que se refuerza con los chats del grupo 'La Botica' en Telegram que este miércoles difundió IDL-reporteros, en los que Keiko Fujimori, sus congresistas y asesores coinciden en que es "un asunto de supervivencia" mantener al actual fiscal de la Nación en el cargo. Los pantallazos de esas conversaciones, que además revelan cómo en Fuerza Popular conspiraron para desprestigiarlo, fueron leídos por el fiscal Pérez durante la audiencia.
"Reitero una vez más: nunca he interferido en el trabajo del Equipo Especial [del Caso Lava Jato] que yo mismo he unificado, siempre respeté su autonomía", dijo en su cuenta de Twitter Pedro Chávarry. "Ningún fiscal puede decir que lo induje a favorecer o perjudicar a algún partido político o a alguna persona determinada", agregó el cuestionado fiscal de la Nación, sobre quien pesan aún tres denuncias en el Congreso por sus nexos negados con 'Los cuellos blancos del puerto', mafia que había coaptado al sistema de justicia, sin que hasta el momento sean vistas.
Para la mayoría de bancadas, el blindaje del fujimorismo a Chávarry es evidente y escandaloso. De hecho, le exigen a Keiko Fujimori que ordene a su bancada que deje de proteger al fiscal de la Nación si es que quiere un diálogo y un "reencuentro nacional" como invocó esta semana, en medio de su complicada situación judicial que ha desatado una crisis sin precedentes en su partido.
DATOS
> Según la más reciente encuesta nacional de Datum, la cifra de peruanos que está en desacuerdo con la continuidad Pedro Chávarry como fiscal de la Nación sube a un contundente 77%. Solo el 11% del país pide que se mantenga.
> Y para el 79%, Pedro Chávarry debe irse junto con los demás fiscales supremos que están implicados en la trama corrupta de 'Los cuellos blancos del puerto'.
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