El Ministerio Público se complica con la investigación al fujimorismo. El fiscal superior coordinador de las fiscalías contra el lavado de activos, Rafael Vela Barba, busca a un magistrado que acepte investigar a la lideresa de Fuerza Popular, Keiko Fujimori, luego de que se confirmara que la anotación "Aumentar a Keiko 500", que aparece en una agenda de los celulares del empresario Marcelo Odebrecht.
El fiscal supraprovincial titular Germán Juárez Atoche, a cargo del caso Humala-Heredia, acusados de recibir US$3 millones de la constructora brasileña para la campaña del 2011, habría solicitado su inhibición por no estar en condiciones de asumir la investigación sobre los presuntos aportes de Odebrecht a la campaña presidencial de Keiko Fujimori, por la sobrecarga laboral que tiene.
Desde noviembre del 2016, Juárez Atoche viene investigando los "Fujicocteles", a través de los cuales el partido de Keiko justificó la recaudación de hasta 750 mil soles, para la última campaña electoral, pero la indagación está entrampada por la resistencia de la hija del expresidente Alberto Fujimori a declarar sobre estos misteriosos aportes.
Odebrecht y sus complicaciones
El rumbo de las investigaciones al fujimorismo cambió el 15 de mayo pasado, cuando Juárez, en Curitiba, recogió la declaración de Marcelo Odebrecht, en el marco de la investigación a los Humala-Heredia. Ahí el empresario dijo que la constructora también realizó aportes al fujimorismo y al Apra. Luego, hace unas semanas, las autoridades brasileñas comunicaron que remitirán unas copias de las agendas electrónicas del ex presidente de la constructora donde aparece la anotación que compromete a Keiko Fujimori.
Esta declaración y posterior confirmación de la nota de Odebrecht obligaron a Juárez a abrir una investigación preliminar, que ahora alega que no podrá ejecutar por su recargada agenda de trabajo. Esta situación —según fuentes del Ministerio Público consultadas por La República— motivó que Vela y Juárez se hayan reunido la última semana con al menos tres fiscales para encargarles la investigación la excandidata presidencial.
Las mismas fuentes indicaron que ninguno de magistrados consultados respondió de inmediato, debido a que el encargo es difícil de asumir, sobre todo si es que no tienen el respaldo institucional suficiente para contener una arremetida fujimorista.
En ese sentido, Vela Barba y el del fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, han ofrecido todo su apoyo a pesar de que un fiscal provisional puede ser removido en cualquier momento. Lo cierto es que este tipo de investigación debería estar a cargo de un fiscal provincial titular, como Juárez, explica La República. Si se concreta que el caso quede en manos de otro fiscal, sería la segunda o tercera vez que un fiscal supraprovincial titular de lavado de activos se aparta o se niega a investigar los aportes a las campañas fujimoristas.
En mayo del 2016, la fiscal supraprovincial Manuela Villar Ramírez también se inhibió de investigar las declaraciones del piloto Jesús Vásquez —colaborador de la DEA que grabó al ex secretario general del fujimorista Joaquín Ramírez— sobre los 15 millones de dólares que Keiko Fujimori le habría entregado, para 'lavarlos' en una cadena de grifos de su propiedad. Desde su renuncia al caso, la investigación de las finanzas de Ramírez quedó en manos de la fiscal adjunta Sara Vidal, quien debe ser confirmada en el cargo cada seis meses y hasta que no cierre el caso, el Consejo Nacional de la Magistratura no la va a nombrar titular.
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