El proceso que busca asegurar el pago de una futura reparación civil continúa en marcha. El Programa Nacional de Bienes Incautados (Pronabi) anunció que usará los inmuebles embargados al expresidente Alejandro Toledo, sobre quien pesa una orden de captura de internacional por recibir US$ 20 millones de Odebrecht, como parte del proceso penal que se le sigue por el delito de lavado de activos, en el Caso Ecoteva.

Los siete inmuebles incautados al exmandatario, aún prófugo de la justicia en Estados Unidos, son los de la Torre Omega (que incluyen una oficina, tres estacionamientos y un depósito) y las casas ubicadas en Las Casuarinas (Lima) y Punta Sal (Tumbes). El valor de las propiedades supera los S/14 millones. A estos se suman la antigua oficina de Ecoteva, ubicada en la Av. Manuel Olguín 211, en Surco, así como los tres estacionamientos y el depósito ubicados en ese distrito, serán cedidos en uso a la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales.

La ministra de Justicia, Marisol Pérez Tello, explicó que la incautación estará vigente hasta que el Poder Judicial ordene la pérdida de dominio de sus propietarios. Luego de ello, el inmueble será subastado. Asimismo, justificó la entrega de esta oficina argumentando que no se puede esperar que el Estado la mantenga y pierda así recursos.

“Nos pareció emblemático utilizar estos bienes para ayudar a los gobiernos regionales, a la descentralización y a la democracia, para que puedan tener un espacio para trabajar aquí con tranquilidad”, afirmó la ministra.

El arrendamiento

Debido a los altos costos de mantenimiento que representan y a sus ubicaciones en zonas residenciales, los inmuebles de Las Casuarinas, en Lima, y el de Punta Sal, en Tumbes, no podrán ser usados por entes públicos. “Se está considerando su arrendamiento mediante la figura de la subasta pública. Ello con la finalidad de que el arrendatario asuma los costos de mantenimiento, evitando así la carga económica para el Estado”, señalaron desde el Pronabi.

La casa en Las Casuarinas fue adquirida el 2012 por Eva Fernenbug, suegra de Toledo y también procesada por el caso Ecoteva. La madre de Eliane Karp compró el inmueble con dinero que le fue transferido de la empresa Ecoteva, con sede en Costa Rica.

A través de esta compra se descubrió toda la maraña del Caso Ecoteva, ya que en el 2013 la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) reveló que con el dinero de esta offshore no solo se pagaron las dos propiedades de Surco, sino que también se canceló la deuda de US$277.309 que el matrimonio Toledo Karp tenía por su casa en Punta Sal.

DATO

También se mantiene incautada la casa de Toledo en la urbanización Camacho, en La Molina, en este caso por el proceso que se le sigue por el soborno de la constructora brasileña Odebrecht por la adjudicación de dos tramos de la carretera Interoceánica Sur.

(Foto de cabecera: El Comercio)

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