La presente campaña electoral ha sido quizás la de más bajo nivel de debate en los últimos años. Han primado las clásicas puyas entre candidatos, así como un proceso de tachas, elementos que han alejado a la ciudadanía de conocer sus principales ideas.  

Pero lo cierto es que los candidatos no han aterrizado propuestas sobre sectores olvidados de la sociedad, como son los pueblos indígenas y los habitantes de las zonas periféricas de la capital, cuyas necesidades no han sido abordadas con profundidad en esta campaña.

LA VOZ DE LAS MUJERES INDÍGENAS

En el local de la Confederación Nacional Agraria, ubicado en Jesús María, cinco dirigentes, representantes de diversos pueblos indígenas de los andes y de la Amazonía, expresaron sus principales necesidades y demandas.

Beatriz Caritimary, de Alto Amazonas (Loreto), indicó que en su comunidad no solo necesitan el título colectivo que demarca el territorio, sino el integral, en el que existe el derecho al subsuelo y al aire, para poder tener mayor capacidad de decisión en procesos de consulta previa. “Tenemos avanzados los estudios. Solo faltan los estatutos para que la Sunat nos inscriba. Si no nos aceptan, iremos hasta la Corte Interamericana de Derechos Humanos”, refirió.

Beatriz Caritimary

Por su parte, Luz Angélica Moya Chanca, de Huancavelica, cuestionó que algunos candidatos hayan propuesto a los pueblos indígenas que sean socios de los proyectos mineros que se instalan en sus regiones. “No queremos dinero, sino respeto para la tierra y el territorio. Queremos conservar nuestra forma de vida”, explicó.

Luz Angélica también llamó la atención sobre la forma en que se realiza la consulta previa: “no se nos garantiza que se cumplan al menos el 50% de nuestras observaciones ni que se plasmen en el documento”, explicó.

Luz Angélica Moya Chanca.

Rocío Chanca Salas, también de Huancavelica, afirmó que algunos artículos de la ley de consulta previa “van contra los pueblos indígenas, pues en la etapa final, quien toma la decisión es el Estado”. “¿De qué consulta estamos hablando?”, se preguntó. Por ello, planteó como solución que se anulen algunos artículos pues “son un atentado contra nosotros, porque afectan nuestra soberanía alimentaria”.

Alina Morote Contreras, de la Federación Provincial de Mujeres Indígenas de Huamanga (Ayacucho), cuestionó que los candidatos presidenciales hablen más de titulación individual “cuando necesitamos titulación colectiva”.

A su turno, Clelia Rivero Reginaldo, de la misma región, recordó que el cambio climático lo vienen sintiendo no solo los pueblos indígenas sino todo el mundo. “Cuánta contaminación causan las empresas mineras, petroleras y gasíferas, que son enviadas (a nuestros territorios) sin tomar en cuenta nuestros derechos”, expresó.

Rocío Chanca, de ONAMIAP Huancavelica, indicó que es necesario tener un espacio propio institucional indígena, como el Ministerio de Pueblos Indígenas, para que puedan tomar sus propias decisiones como organizaciones. Los candidatos deberán tomar en cuenta esta propuesta.

PAMPLONA ALTA: EN PLENA CIUDAD PERO EN EL OLVIDO

Muy cerca del conocido Muro de la Vergüenza”, que divide Las Casuarinas (Surco), de Pamplona Alta (San Juan de Miraflores), para que los vecinos de Pamplona “no crucen” al otro lado, está el asentamiento humano Nuevo Milenio.

Sara Torres, una de las exdirigentes de base, afirmó que aún con sus 16 años de existencia, “los gobiernos no han tomado en cuenta a los peruanos/as que viven en la zona sin servicios básicos ni posibilidades de darles una buena educación a sus hijos”.

Sara Torres.

Además de carencias de agua potable y energía eléctrica, Torres sostuvo que debe declararse una emergencia sanitaria por la cercanía de un criadero de chanchos, así como de un cementerio al aire libre. Pese a los pedidos a las autoridades, no han obtenido respuesta y apenas han visitado la zona, pero solo en épocas de campaña electoral.

También refirió que los vecinos de Pamplona necesitan sus títulos de propiedad, y facilidades para tener una vivienda digna, a través de préstamos “como los que se hacían con el Banco de Materiales. Había mucho apoyo para las familias y estas pagaban”, añadió. 

La señora Torres señaló que la mayor parte de la población de Pamplona Alta no tiene un trabajo digno. Afirmó que algunas señoras son trabajadoras del hogar, pero sus empleadores “prefieren tenerlas por horas en vez de hacerles un contrato, y les dan un sencillo”.

En la salud también existe un déficit que incluso ha costado una vida hace solo un par de meses. La señora Analí Huamayupanqui, de 26 años, con dos niños y uno en camino, perdió a su esposo, un albañil de 30 años, que falleció víctima del dengue.

Sara Torres explica que en toda la zona solo hay cinco puestos de salud, y que uno de estos tiene “una camilla sobre dos ladrillos”. Por lo visto, no cuentan con lo necesario para brindar una atención de calidad. Agregó que Nueva Rinconada “cuenta con un solo nutricionista” y que es necesario que haya al menos tres, “porque las gestantes y los niños pequeños necesitan tener una buena alimentación”.

Tras la diversidad de testimonios “femeninos”, llegó la voz de un varón: Epifanio Velásquez, dirigente de Nuevo Milenio, quien manifestó que pese a estar a una hora del centro de Lima, “en otras provincias están mejor que aquí”. 

Don Epifanio no envió propuestas a los candidatos, pero los invitó a que conozcan esa realidad. Porque los habitantes de Pamplona Alta, como los pueblos indígenas, existen.

CANDIDATOS SE ACERCAN

Este sábado 19 a las 3 de la tarde, representantes de los partidos políticos que participan en esta campaña electoral se darán cita en el Hotel Carrera (León Velarde 123 Lince), en el Foro social electoral: Nuestro futuro está en juego, organizado por Actua.pe.

En este foro serán expuestas todas estas demandas, además de las de la juventud, que participará activamente en este espacio. Más detalles aquí.

Fotos: Carlos Ly, para Actua.pe.

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