Luego de que el 15 de enero pasado, Nicolás Maduro anunciara un decreto de emergencia económica para hacerle frente a la inflación y desabastecimiento que sufre Venezuela, el presidente llanero dio a conocer finalmente las medidas con las que espera revertir esta severa crisis. 

La oposición ha denominado esta serie de disposiciones como 'el paquetazo de Maduro', aunque el mandatario asegura que no se trata de un 'paquete neoliberal'. Y a pesar de que varios analistas, consultores e incluso funcionarios estatales recomendaron este tipo de medidas, siempre se quedaron en propuestas. 

En resumen, lo que Maduro busca con esto es aumentar los ingresos del Estado para aliviar el déficit fiscal, el principal estímulo de la inflación, que en Venezuela es la más alta del mundo y alcanzó el 615,3% durante la era chavista, según datos del mismo Banco Central del país. 

Aquí las cinco medidas que harán que la situación económica de Venezuela se reviera según Maduro:

1. Aumento en el precio de la gasolina

Quizá se trata de la medida más impopular que podría tomar un mandatario venezolano, porque el país llanero tiene una de las reservas de petróleo más grandes del planeta. Los venezolanos están acostumbrados a pagar una de las gasolinas más baratas y subvencionadas del planeta. 

Es así que el 1989, el aumento de los precios del combustible ocasionó el Caracazo, una cadena de disturbios y saqueos que terminó con centenares de muertos en la capital. 

Asimismo, en 1996 se aplicó un nuevo aumento que aunque no levantó protestas, hizo que el precio permanezca fijo a pesar de la inflación que desde ese momento fue del 10.000%. 

El gobierno afirma que destina 12.500 millones de dólares al año para abastecer la demanda interna de gasolina, una cifra que ocasiona una serie de desequilibrios fiscales. 

En vista de ello, ahora la gasolina costará 1 bolívar por litro para la de 91 octanos y 6 para la de 95, esta última es la que usa el 70% de los conductores del país. 

Se trata de un aumento del 1.328% y del 6.085, respectivamente, un incremento que según varios venezolanos hará subir los precios del transporte, y como consecuencia de todos los bienes y servicios que de por sí ya son bastante caros debido a la inflación. 

2. Devaluación

Con la finalidad de hacer crecer más los ingresos del Estado, Maduro anunció la reestructuración del sistema de cambio de divisas que representa la devaluación. Sin embargo, no erradicará completamente el polémico control de cambios ejercido por el gobierno. 

Es así que el sistema que antes tenía tres tasas de cambio oficiales, ahora solo tendrá dos: la de 6,3 bolívares por dólar pasará a 10 bolívares, la de 12 bolívares (Sicad) se elimina y la de 200 (Simadi) se mantiene pero será flotante. 

La de 10 bolívares estará destinada para medicinas, programas sociales, alimentos y maquinaria para producir, y la de 200 para todo lo demás. 

A pesar de ello, varios analistas consideran que los incentivos para la corrupción se mantendrán, ya que obtener un dólar a la tasa oficial básica y luego venderlo en el mercado negro, donde se cotiza a más de 1.000 bolívares, seguirá siendo un negocio bastante lucrativo. 

Asimismo, aseguran que cuando no hay dólares (según Maduro la entrada de la divisa se redujo en un 90% en un año por la caída del precio del petróleo), no hay sistema de control de cambios que genere estabilidad. 

3. Ajuste de precios

Maduro anunció que los precios de los productos cuyo valor es establecido por el Estado serán revisados. Y es que según varios especialistas, la principal causa de la escasez en Venezuela es el control de precios a los productos básicos. 

Los denominados 'productos regulados', que suman alrededor de 100, tienen un precio inferior al del mercado. Es así que con esta medida el gobierno buscar facilitar el acceso de los mismos a toda la población. 

Sin embargo, con los precios tan bajos la demanda es bastante grande, un hecho que Maduro espera revertir al aumentarles el precio 'con base a su precio real'.

Y a pesar de que en teoría esta medida incentivaría la importación y la producción de estos productos, muchos sienten temor de que la permanencia del control estatal de precios haga que el ajuste sea irrelevante dentro de unos meses, cuando la inflación separe nuevamente el valor real del valor regulado. 

4. Sistema alimentario

Una de las frases que más llamaron la atención del discurso presidencial fue la de 'El Abasto Bicentenario se pudrió'. 

Con esta expresión, Maduro se refiere a una de las principales redes de supermercados del Estado, consecuencia de varias de las expropiaciones que ordenó el fallecido Hugo Chávez hace algún tiempo. 

En ese sentido, las autoridades arrestaron solo en esta semana a medio centenar de funcionarios de Abasto Bicentenario por presuntamente estar implicados en una red de corrupción que se aprovechaba de su acceso a los bienes de precio regulado. 

Es de esta manera que para reestructurar el sistema de distribución y venta de alimentos por parte del Estado, Maduro anunció la creación de una empresa dedicada a este rubro y la intervención de otras redes de mercados estatales como Mercal y PDVAL. 

5. Aumento de salarios

La única medida dictada por el presidente que no tendrá un impacto negativo directo en la economía de los venezolanos es el aumento del salario mínimo, de los bonos alimenticios y de las pensiones a partir del 1 de marzo. 

Y es que Maduro anunció que el salario mínimo pasará de 9.649 bolívares a 11.578 bolívares. Asimismo dijo que el bono de alimentación pasará de 6.750 a 13.275.

En otras palabras, quienes reciban estos ingresos, es decir la gran mayoría de venezolanos, tendrán un sueldo mensual de 24.853 bolívares (124 dólares a la tasa de cambio más alta).

A pesar de ello, muchos creen que con una inflación que supera el 140% anual, los aumentos salariales no serán significativos. 

En ese sentido, el centro de estudios CENDA afirmó que la canasta básica de alimentos mensual tiene un costo de 100.000 bolívares, más de cuatro veces el salario mínimo próximo a establecerse. 

Cabe indicar que el los 17 años de gobierno chavista (Hugo Chávez y Nicolás Maduro) ambos mandatarios aumentaron el sueldo mínimo 31 veces, algo que para el oficialismo es un orgullo. Por su parte, la oposición considera la medida como prueba más del 'desastre revolucionario'.

(Con información de la BBC Mundo)

(Foto de cabecera: EFE)