El mundo, especialmente el continente americano, se encuentra en alerta por la propagación del virus del zika, una enfermedad que a pesar de no ser mortal para los adultos, supone riesgos muy altos para los bebés recién nacidos por unas posibles malformaciones causadas por la infección. Es así que numerosos países, principalmente Brasil, vienen asociando el zika con la microcefalia. 

Pero esta condición que afecta el sistema nervioso de los fetos, no es la única que se ha vinculado con la enfermedad. Es así que la Organización Mundial de la Salud también reconoce que hay 'hallazgos consistentes' del aumento de casos de síndrome de Guillain-Barré en las zonas afectadas por el virus. 

Y aunque aún no están establecidos claramente los mecanismos, las causas y los factores de riesgo de la enfermedad, la OMS recomienda a los 24 países americanos y del Caribe que detectaron zika en su territorio que preparen sus servicios de salud para responder mejor a la demanda de una atención especializada para síndromes neurológicos. 

El síndrome de Gauillain-Barré

Se trata de un trastorno autoinmune que afecta al sistema nervioso y termina causando parálisis progresiva en los músculos del cuerpo. 

Por lo general se asocia a procesos infecciosos aunque hay pocos trabajos que analicen esta hipótesis. 

Lo que se sabe hasta ahora es que cuando se contrae la enfermedad, el sistema inmunitario, encargado de proteger al cuerpo de las dolencias identificando y atacando a los agentes patógenos, afecta a una parte del sistema nervioso periférico. 

En concreto, daña la mielina, la capa aislante que cubre los nervios. Es de esta manera que estos últimos se vuelven incapaces de transmitir señales con eficacia. 

Por esta razón los músculos comienzan a perder su capacidad para responder y los afectados comienzan a sentirse débiles. Por su parte, el cerebro recibe menos señales sensoriales del resto del cuerpo y por lo tanto, el paciente empieza a perder sensibilidad ante el dolor, el calor, las texturas y otras sensaciones. 

La insensibilidad suele empezar por los pies y luego, muy rápidamente, avanza hacia el resto del cuerpo hasta terminar en el rostro. 

Pero allí no acaba pues si la enfermedad logra afectar a los nervios del tórax y del diafragma, y esos músculos se encuentran débiles, el paciente puede llegar a necesitar asistencia respiratoria. 

Enfermedad poco difundida

A pesar de lo grave de los síntomas de la afección, se trata de una enfermedad muy poco extendida. 

La OMS calcula que la incidencia al año del síndrome de Guillain-Barré va entre los 0,4 y 4 casos por cada 100.000 habitantes. 

Además, aunque no hay una cura específica para la condición, los tratamientos suelen centrarse en reducir la gravedad de los síntomas. 

Los procedimientos, que se suelen aplicar en la etapa más aguda del síndrome, son la inmunoterapia con plasmaféresis (recambio de plasma) y la administración de inmunoglobulina intravenosa. 

La primera se usa para eliminar o bloquear los anticuerpos que atacan las células nerviosas, mientras que la segunda consiste en inyectar directamente inmunoglobulina, un anticuerpo. 

Cabe resaltar que la gran mayoría de personas que padecen la enfermedad sobreviven y se recuperan por completo, sin embargo pueden tardar varias semanas o meses y con frecuencia sufren de discapacidad prolongada por lo que requieren rehabilitación. 

El zika y el síndrome de Gauillain-Barré

La vinculación entre ambas dolencias se registró por primera vez en la Polinesia Francesa, durante un brote de zika entre el 2013 y el 2014. 

En ese momento, 74 de los pacientes con zika presentaron también afecciones neurológicas o autoinmunes, y 42 de ellos fueron diagnosticados específicamente con el síndrome de Guillain-Barré.

Asimismo, en julio del 2015, Brasil informó sobre la detección de pacientes con síndromes neurológicos cuyo historial reciente presentaba infección por zika.

En enero de este año, El Salvador registró un incremento inusual de la enfermedad en su territorio. Según la Organización Panamericana de la Salud, el país tiene 14 casos de Guillain-Barré por mes, es decir 169 por año.

Es así que entre el 1 de diciembre del 2015 y el 6 de enero del 2016 hubieron 46 pacientes con el síndrome, de los cuales dos murieron. 

En cifras de la Organización Panamericana de la Salud, los otros países que también reportaron zika son Barbados, Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, El Salvador, Guadalupe, Guatemala, Guyana, la Guayana Francesa, Haití, Honduras, Martinica, México, Panamá, Paraguay, Puerto Rico, la isla de San Martín, Surinam y Venezuela.

Además, el Ministerio de Salud de Costa Rica ya confirmó el primer caso, el de una persona que fue infectada en un viaje a Colombia. 

Y por el lado europeo, Dinamarca, España y Austria también ha reportado los primeros casos, aunque todos fueron contagiados en viajes a América. 

La preocupación mundial

"Pasamos de diagnosticar 10 casos de Guillain-Barré al año a tener 13 pacientes afectados en un mes. El historial médico de estos 13 pacientes indica que tuvieron dengue, zika o chikungunya antes de presentar los síntomas de Guillain-Barré".

Y es que estas tres enfermedades pueden ser transmitidas por un mismo mosquito. Además presentan síntomas muy parecidos. 

Como la nación centroamericana, Venezuela también ha reportado casos de Guillain-Barré. Es así que el Hospital Luis Ortega de la ciudad de Porlamar informó de cuatro pacientes con la enfermedad. 

Falta de estudios

La OMS reconoce la coincidencia 'espacio-temporal' entre el zika y el síndrome de Guillain-Barré, pero dice que aún le faltan más datos para establecer un vínculo directo y concreto entre ambas enfermedades. 

Es así que prefiere recomendar a los países afectados que aumenten la vigilancia de esta enfermedad autoinmune y otras afecciones neurológicas como la meningitis, la encefalitis, el síndrome de Fisher y la meningoencefalitis. 

En ese sentido y con el objetivo de avanzar en los descubrimientos para hacerle frente al impacto del zika, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos empiezan, a finales de enero, un estudio en Brasil para determinar si existe alguna relación entre el zika y el síndrome de Guillain-Barré. 

(Con información de la BBC Mundo)

(Foto de cabecera: ebc.com.br)