Han pasado solo cinco días desde la masacre yihadista en París, donde fueron asesinadas 129 personas, y un nuevo megaoperativo antiterrorista de la Policía francesa se realizó en las últimas horas en Saint-Denis, un suburbio de la capital francesa. 

La operación tenía como objetivo encontrar al hombre más buscado del momento, Abdelhamid Abaaoud, uno de organizadores de la matanza del viernes. Sin embargo, los agentes hallaron a su pareja, una mujer que se hizo estallar durante el operativo usando un cinturón con explosivos. 

Según informó la prensa inglesa, la kamikaze estaba escondida en un departamento de Saint-Denis. Algunas versiones explican que con ella se encontraban otros cuatro yihadistas, entre los que estaba su pareja, aunque muchos creen que estaría en Siria. 

Y es que después de una hora del inicio del operativo, tres yihadistas armados se encontraban atrincherados en la mencionada vivienda. Al respecto, el fiscal general, François Molins, confirmó que 'tres hombres fueron detenidos en el apartamento en el operativo y puestos bajo custodia policial'. Y añadió que además "un hombre y una mujer fueron arrestados en las inmediaciones de la vivienda".

Los trabajos de búsqueda, que contaron con un helicóptero, decenas de autos policiales y al menos 50 militares, concluyeron después de siete horas. Hasta el momento, se sabe que dos extremistas murieron, al menos siete personas han sido detenidas y cuatro agentes policiales y un transeúnte se encuentran heridos. 

Cabe resaltar que Saint-Denis es la zona aledaña al Stade de France, lugar donde el viernes ocurrieron varias explosiones en el momento en el que se disputaba un partido amistoso entre la selección local y Alemania. En el estadio estaba el presidente Francois Hollande, quien fue evacuado al instante. 

Además la comuna, ubicada al norte de París, alberga a pobladores de clase media baja, en su mayoría inmigrantes. 

Es así que al iniciar el operativo las autoridades recomendaron a los habitantes a permanecer en sus domicilios.

Las escuelas permanecieron cerradas al igual que los accesos al metro, además de bloquearse la circulación de autobuses y tranvías. 

La ayuda de un ciudadano

Un hombre de aproximadamente 30 años, quien prefirió permanecer en el anonimato, contó que la Policía allanó su departamento situado en la calle de Corbillon. Al parecer, el objetivo era una persona que no conocía y que le había pedido que lo alojara unos días:

"Le dije que no tenía colchón, me dijeron 'no importa', sólo querían agua y rezar. Me dijo que venían de Bélgica". 

(Foto de cabecera: Efe)