El último caso que debe aclarar la actual gestión de la Municipalidad Metropolitana de Lima consiste en la anulación de un megaproyecto y el desvío de sus fondos para otra obra. Las declaraciones de la teniente alcaldesa de Lima, Patricia Juárez, al programa Agenda Política nos pueden llevar a inferir que Castañeda Lossio actúa como si la gestión de Villarán nunca hubiese existido. Es decir, o ignoran todo lo hecho o lo borran.

Sobre la polémica construcción de tres bypasses que afecta a las avenidas 28 de julio, Arequipa, Arenales y Garcilaso de la Vega, la teniente alcaldesa dijo:

"Esta obra tendrá un costo de 50 millones de soles. Va a beneficiar a 300 mil personas. Detectamos un embotellamiento en la zona. Esta obra formaba parte del proyecto que el alcalde había venido trabajando desde la primera vez que fue electo. Esto no necesita aprobación del MEF ni necesita SNIP porque esto forma parte del proyecto Línea Amarilla del 2009"

Es decir, como ellos dejaron la Municipalidad de Lima en el 2010, lo que hacen ahora al volver, en el 2015, es retomar los proyectos que dejaron en su gestión pasada. ¿Tenían planes para la capital del Perú? Al parecer ninguno porque esta obra, anunciada con bombos y platillos con harta publicidad, no es una nueva idea, sino un regreso al pasado.

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¿Cómo lo hizo? Para financiar estos bypasses, Castañeda acordó con la empresa brasileña OAS, concesionaria de Vía Parque Rímac, dejar de lado el proyecto Río Verde, que iba a recuperar 6 kilómetros del río y construir un túnel por debajo de él, beneficiando a los distritos de El Agustino, Cercado de Lima, San Juan de Lurigancho y San Martín de Porres. Todo esto, ya fue.

¿Qué dice Juárez al respecto?

"Río Verde fue modificado 5 veces, pero sí estaba el fideicomiso. Hay prioridades. Río Verde es una obra importante pero en este momento estamos en una situación caótica. Hay 4 años de atraso en obras de infraestructura vial".

Según Patricia Juárez, en la anterior gestión se hizo poco o nada. Pero precisamente el proyecto Río Verde era una obra importante que dejó la gestión anterior, pero la actual la ha cancelado. ¿De verdad no se hizo nada? Contrasten con esta entrevista de Rosa María Palacios al aprista Enrique Cornejo (a ninguno de ellos se les puede acusar de "rojos" o "susanistas").

Como vemos, con Castañeda, es como si Lima hubiese regresado al 2010, cuando abandonó el Palacio Municipal para darle paso a Villarán. Ahora, en el 2015, la actual gestión llegó e hizo como si nada hubiese pasado en estos últimos 4 años. Por ello, anuló los proyectos que había dejado en marcha Villarán y retomó los pendientes del 2010.

Con Luis Castañeda, hemos retrocedido. Y vamos a retroceder más.


(Foto de portada: Andina / Carlos Lezama)


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