Cada testimonio que se toma en el marco de la investigación a Keiko Fujimori revela nuevos aportes no declarados para sus campañas políticas. Este martes, el hoy testigo de cargo Jorge Yoshiyama Sasaki declaró ante la fiscal adjunta Elvia del Carmen Caro, integrante del Equipo Especial Lava Jato, que empresarios del llamado 'Club de la Construcción' aportaron en secreto a la campaña presidencial de la lideresa de Fuerza Popular en 2016. 

Según información de IDL- Reporteros, en su testimonio, Yoshiyama Sasaki narró que hacia fines de 2015 o a inicios de 2016 Keiko Fujmori le pidió que se reúna con su amigo Federico Aramayo Málaga, dueño de la compañía Aramsa Contratistas Generales e hijo de Federico Aramayo Pinazo, y junten a un grupo de empresarios para que aporten a su campaña electoral

“Keiko Fujimori Higuchi me pide si puedo reunir a empresarios del rubro de la construcción para que puedan hacer una donación nuevamente", comentó el sobrino de Jaime Yoshiyama, quien aludía así a que, en 2011, el fallecido Federico Aramayo Pinazo, padre Aramayo Málaga, junto a dueños de constructoras para aportar a la primera campaña presidencial de la lideresa fujimorista.

Dos semanas después del pedido de Keiko Fujimori, según dijo Yohiyama Sasaki, Aramayo Málaga le confirmó una reunión con cuatro empresarios interesados en aportar en el proyecto electoral de la jefa de Fuerza Popular. Estas fueron Ernesto Tejada (Obrainsa), “señor Manrique” (Superconcreto), Fernando Castillo (ICCGSA) y Jorge Peñaranda Castañeda (Alpha Consult).

Tras esa reunión, a la que asistió también la excandidata presidencial, Peñaranda Castañeda entregó en efectivo 10 mil dólares a Jorge Yoshiyama, y días después, previa coordinación, hicieron lo mismo los otros tres empresarios que expresaron su interés en apoyar a la campaña fujimorista. De esta manera, el sobrino del exsecretario general del fujimorismo reunió 40 mil dólares, dinero que entregó a Keiko Fujimori “en su oficina de la calle Bucaré”. 

“Le comunicaba que quería ir a verla, a lo que ella usualmente me respondía ‘ven mañana’ o ‘ven pasado’, o tal día, y yo iba en la fecha y hora acordada para entregarle los sobres, los cuales le entregué en cuatro oportunidades, no recuerdo muy bien dónde, pero los lugares en los que le entregaba era o en su departamento en Surco o en su oficina de Bucaré”, detalló.

En otra parte de su testimonio, Jorge Yoshiyama indicó que otros empresarios hicieron pagos mensuales para la campaña presidencial de Keiko Fujimori de 2016. El monto aproximado de esos aportes fue 400 mil soles. 

“Hacia finales del año 2012”, relata Yoshiyama Sasaki, “Keiko Fujimori me pide personalmente si puedo juntar un grupo de amigos empresarios que estarían interesados en apoyar su candidatura y que la modalidad sería una reunión cada dos o tres meses con todas estas personas en algún sitio privado, en una casa, y que la donación sería de mil soles mensuales, y le digo a Keiko Fujimori ‘voy a buscar a amigos interesados y te aviso’. Calculo que para después del verano de 2013 logré juntar un grupo de aproximadamente de ocho a diez personas que sí estaban interesadas en apoyar y conversar con ella una vez cada dos o tres meses, algunos de este grupo eran amigos míos y algunos otros eran amigos de amigos que yo recién los conocí en ese momento”.

Relató que las reuniones se hacían en la casa de alguno de los integrantes del grupo, a las que asistía Keiko Fujimori, a veces con Mark Vito. “Allí ella contaba sobre su campaña, sus planes de gobierno, lo que estaba haciendo en el interior del país, y los integrantes del grupo le hacían preguntas y le hacían algunos consejos sobre la problemática del país”, afirmó Yoshiyama.

Este martes, el exejecutivo de Odebrecht Eleuberto Martorelli afirmó ante los fiscales del Equipo Especial Lava Jato que Jorge Peñaranda Castañeda, presidente de la consultora en ingeniería Alpha Consult, habría utilizado a su empresa para generar recursos económicos para la caja 2 de la constructora brasileña.  

Peñaranda y a su hijo Jorge Peñaranda Málaga son investigados por haber recibido US$2,6 millones como soborno -a través de la ‘offsore’ Randalee Investment- a cambio de realizar estudios de factibilidad sobre las carreteras Interoceánica Sur y Norte, ambas construidas por consorcios que integró Odebrecht.

(Foto de cabecera: Andina)

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