Luis Mejía Lecca, el extesorero de Fuerza Popular, fue quien confesó a la fiscalía la quema de documentos con información contable de la campaña de Keko Fujimori. Esa información, potencialmente incriminatoria, había sida sustraída del local del partido de la calle Morochucos y destruida para que no cayeran en las manos del fiscal José Domingo Pérez durante el allanamiento del 7 de diciembre de 2017. 

Según la declaración testimonial de Mejía Lecca, quien cumple prisión preventiva en el marco de la investigación por lavado de activos a Keiko Fujimori y su partido, pero ha empezado a colaborar con el equipo Lava Jato para conseguir beneficios penitenciarios, fue Ana Herz de Vega,  ex secretaria nacional de organización de Fuerza Popular, quien coordinó la incineración de documentos, reveló La República este miércoles.

El extesorero indicó que la desaparición de documentos contables se realizó en la casa de la misma Ana Herz, versión corroborada por otro testigo que intervino en los hechos relatados por Mejía, quien además aportó datos precisos sobre cómo la cúpula fujimorista decidió ocultar y destruir documentos del local que funcionó como el búnker de la campaña presidencial de Keiko Fujimori de 2011.

Mejía contó además que dos personas que trabajaban con la también extesorera Adriana Tarazona, Giannina Delgado Rospigliosi y Rocío Pardo-Figueroa Álvarez, se llevaron gran cantidad de documentos sobre los aportes a la campaña de Keiko a sus domicilios para evitar que sean incautados por las autoridades.

"El 7 de diciembre de 2017, cuando se realizó el allanamiento del local del partido ubicado en la calle Los Morochucos, en Surco, las señoras Giannina Delgado Rospigliosi y Rocío Pardo-Figueroa (Álvarez) llevaron a sus respectivos domicilios documentos contables en cajas referidas a las campañas de 2011 y 2016 del partido, dado que eran personal de suma confianza de la señora Adriana Tarazona Martínez (extesorera fujimorista)", se lee en al declaración testimonial de Mejía Lecca, quien fungió como personero legal de Fuerza Popular en las elecciones presidenciales de 2016.

Precisamente, los dos inmuebles que allanó este martes el fiscal Pérez Gómez, en Surco y Miraflores, figuraban como domicilios de Delgado Rospigliosi y de Pardo-Figueroa Álvarez. De acuerdo a la fiscalía, ambas manejaban información contable y recibos de supuestas donaciones que entregaban a los abogados de los falsos aportantes para que le mientan a las autoridades que investigan el caso.

El magistrado del equipo Lava Jato aludió el martes también que habían podido comprobar que se sustrajo información relevante del local de la calle Morochucos que constituían evidentes prácticas de obstrucción a la justicia.

En su testimonio, Mejía Lecca confirmó también que Herz de Vega lo convocó para destruir documentos del partido en la casa de ella, en la avenida Rinconada Baja,  en La Molina. Herz le comentó que debían eliminar la información potencialmente comprometedora para Keiko y el partido. Por ello, Mejía convocó a dos personas de confianza, Shirley Montenegro Flores y Melissa Sánchez Bernaola, para cumplir la tarea encomendada por la cúpula de la organización.

El fiscal Pérez citó a Montenegro y Sánchez para interrogarlas en su despacho por los hechos descritos por Mejía. Pero solo asistió esta última, quien confirmó todo lo que Mejía relató. Montenegro no se ha presentado en las tres veces en que fue citada, por lo que sería llevada de grado o fuerza a rendir su manifestación.

En su relato ante el fiscal, Melissa Sanchez contó que Luis Mejía le pidió que lo acompañara que en principio no le especificó, pero le dijo que era por un tema confidencial y le pidió discreción, ya que se trataba de ver unos documentos. 

"(...) Me indicó que nos encontraríamos entre las avenidas Javier Prado y La Molina. Al día siguiente cuando ya estaba en camino, Luis Mejía me llamó y me dijo que fuera avanzando porque se le había presentado un imprevisto e iba a tardar en llegar. También me dijo que iría Shirley Montenegro Flores. Nos encontramos en el punto y juntas nos trasladamos hasta la dirección. Como se demoraban en atendernos, nos comunicamos con Luis Mejía y nos dijo que iba a llamar a la señora Ana Herz de Vega para que nos atendieran. Ahí recién me entero que dicho inmueble era la casa de Ana Herz de Vega".


Sánchez y Montenegro separaron los documentos comprometedores que luego fueron incinerados. Así lo contó Sánchez:

"Estando en el primer piso me acerqué a unas gradas que dan al jardín. Lo mismo hizo Shirley (Montenegro). Desde ahí pudimos observar que Luis Mejía y Ana Herz conversaban en una zona donde está ubicado un horno o parrilla empotrada donde había fuego y se notaba que ellos dos estaban quemando algo. No podría precisar concretamente qué es lo que estaban quemando, pero definitivamente no se trataba de alimentos".

Según las manifestaciones testimoniales, los hechos ocurrieron el 9 de marzo de 2018, en presencia también del esposo de Ana Vega, Santiago Vega Melgar.

Así, Mejía Lecca se convirtió en el primer miembro de la dirigencia fujimorista en aportar información clave sobre acciones de obstrucción a la justicia de la cúpula del partido, encabezada por la propia Keiko Fujimori, que busca revertir el mandato de prisión preventiva que pesa sobre ella, aunque con pocas posibilidades de éxito.

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