El jefe del gabinete, César Villanueva, destacó el consenso logrado entre el Ejecutivo y el Legislativo para aprobar los cuatro proyectos de ley que serán sometidos a referéndum en diciembre para la reforma del sistema político y judicial, pese a que las iniciativas originales sufrieron modificaciones que, en algunos casos, terminaron por desnaturalizar el objeto de las medidas, como el caso de la no reelección de congresistas.

"Obviamente, en una situación de esta naturaleza, tú no puedes llegar al 100% de las exigencias de parte. Pero el balance es positivo", dijo en RPP, luego de señala que, más allá de la crispación política y las discrepancias con el fujimorismo, se logró avanzar en las reformas que se plantearon al Congreso.

Pero lo cierto es que expertos y analistas coinciden en que el Congreso, controlado por el fujimorismo, modificó las iniciativas originales con el objetivo de sacarle la vuelta a las reformas del Ejecutivo. "El Congreso ha aprobado las propuestas por no quedar mal, pero no dejó pasar lo que no le convenía", sostuvo Andrés Calderón, director de la Clínica Jurídica de la Universidad del Pacífico. "Han cambiado lo que iba contra sus intereses, como la no reelección o financiamiento de partidos. Y le da al Ejecutivo un 'tómalo o déjalo'", agregó.

En el caso de la no reelección se dejó abierta la posibilidad de que los actuales congresistas postulen en 2021, porque el texto original del Ejecutivo (que decía "los congresistas no pueden ser reelegidos de manera inmediata para un nuevo periodo") se cambió por el de "los parlamentarios no pueden ser reelegidos para un nuevo periodo, de manera inmediata, en el mismo cargo".

Así, la trampa está en la frase, "en el mismo cargo", porque para el 2021 habrá un Parlamento bicameral y resulta que ninguno de los actuales 130 congresistas han sido diputados o senadores, por lo que si quisieran, podrían postular a cualquiera de las dos cámaras si cumplen el resto de requisitos, aunque el presidente Martín Vizcarra haya dicho que la prohibición alcanza los actuales parlamentarios, en la norma aprobada no lo dice de forma taxativa.

Otra modificación aprobada restringe la potestad del presidente para poder cerrar el Congreso cuando este niegue dos cuestiones de confianza seguidas al gabinete o censure el equipo ministerial, porque ahora se cuenta solo si hay un cambio de todos los ministros. Este era un cambio que ya el fujimorismo había aprobado en el Reglamento Interno del Congreso, pero el caso debe ser resuelto por el Tribunal Constitucional (TC), porque una norma de menor rango no puede estar por encima de lo que dice al Constitución sobre la cuestión de confianza.   

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