El vocero del Frente Amplio, Wilbert Rozas, tendrá que dejar la vicepresidencia de la Comisión de Ética debido a que la Comisión de Inmunidad Parlamentaria inicia este martes el debate sobre el pedido de la Corte Suprema para levantar su inmunidad parlamentaria.
Las consecuencias de esta solicitud están estipuladas en el reglamento del Congreso: “Los congresistas están prohibidos de integrar la Comisión de Fiscalización, Comisión de Ética y la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales, así como otras comisiones ordinarias que actúen en ejercicio de su función fiscalizadora, cuando se encuentren comprendidos en procesos penales dolosos en los cuales la Corte Suprema ha solicitado el levantamiento de su inmunidad parlamentaria”, indica el inciso D del artículo 20 del reglamento.
El 21 de este mes, el Congreso recibió el pedido firmado por el presidente del Poder Judicial, Duberlí Rodríguez, en el que se solicita levantar el fuero de Rozas para procesarlo por el presunto delito contra la administración pública - peculado doloso, entre otros cargos, en agravio de la Municipalidad de Anta, en Cusco.
La sesión del mencionado grupo parlamentario estaba fijada para las 11 de la mañana en la Sala Bolognesi. La comisión está presidida por el legislador Elías Rodríguez (Célula Parlamentaria Aprista), tiene como vicepresidente a Octavio Salazar (Fuerza Popular) y como secretario a César Vásquez (Alianza para el Progreso).
En el mismo artículo del reglamento se señala que Rozas debería presentar su “inhibición” ante la comisión. “Yo no tengo ningún problema en dejar la comisión, pero eso no significa que tengo algo de culpabilidad en el proceso”, dijo Rozas. Igualmente, recordó que el jueves 24 envió un oficio a la Comisión de Levantamiento de Inmunidad Parlamentaria para allanarse al pedido del Poder Judicial.
“Muchos miembros de la comisión me han dicho que estoy haciendo mal, pero yo quiero que se levante mi inmunidad porque soy inocente”, indicó el frenteamplista.
Quien sí fue más enfática en referirse a la situación de Rozas fue la presidenta de la Comisión de Ética, Janet Sánchez, quien afirmó que el congresista debería dar un paso al costado. “Yo saludo que el congresista pida el levantamiento de su inmunidad, pero el reglamento es claro, por lo que invoco al Frente Amplio a designar su reemplazo”, solicitó.
La historia se remonta a diciembre del 2009, cuando el frenteamplista era alcalde de Anta entre 2007 y 2010. Dicha jurisdicción convocó a un proceso para adquirir un software para la Unidad de Rentas, el mismo que finalmente fue adquirido a la empresa de Kattya Valdez, Innova Cusco Consulters, por un monto de S/10.500.
Sin embargo, la fiscalía sospecha que Rozas tuvo intervención en el proceso para que el sistema ofrecido por Valdez sea contratado de forma directa. Más aún cuando entre el 2010 y el 2011 se señaló, ante los sucesivos errores, que el software no estaba instalado en ninguna computadora. Es por ello que el Ministerio Público considera que el sistema adquirido por la gestión de Rozas era una copia de un sistema otorgado de forma gratuita por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
(Foto de cabecera: Andina)
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