Rechazados. La Primera Sala Penal de Apelaciones Nacional declaró infundada la solicitud de Keiko Fujimori y su esposo Mark Vito, quienes pidieron que el Ministerio Público concluya su investigación que les sigue por el presunto delito de lavado de activos.

En su resolución, este tribunal consideró relevante la Disposición N° 13, del 27 de setiembre del 2017, por la cual la Fiscalía adecuó dicha investigación a las normas contenidas en el Código Procesal Penal y la "Ley contra el crimen organizado" (Ley N° 30077). En esta disposición, se fijó en 36 meses el plazo máximo para realizar la investigación preliminar, el cual corre desde el 8 de marzo del 2016.

En este sentido, la Sala Penal de Apelaciones valoró la complejidad de los hechos investigados por tratarse de una supuesta organización criminal. “Esta Sala Penal de Apelaciones Nacional considera que tales circunstancias, son motivos válidos para considerar razonable el plazo fijado por el Ministerio Público de 36 meses, como duración de las diligencias preliminares”, señaló.

Con ello, el tribunal revocó la decisión del Segundo Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional, que en noviembre del año pasado otorgó un plazo de 10 días a la Fiscalía para que termine las diligencias preliminares.

Los jueces superiores que votaron en mayoría fueron Edita Condori Fernández y Sonia Torre Muñoz. Por su parte, el tercer integrante del colegiado, el juez superior Rómulo Carcausto Calla, emitió un voto discordante y se pronunció porque se confirme la decisión de primera instancia.

En setiembre del 2017, la Fiscalía peruana adecuó la investigación contra la lideresa de Fuerza Popular (FP) y su esposo a la ley contra el crimen organizado. Además, solicitó, vía cooperación judicial internacional, recabar información sobre la sociedad LVF Liberty Institute de Estados Unidos (EEUU), que habría transferido 65 mil dólares en el 2015 al partido fujimorista.

A fines de agosto pasado, el Fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, confirmó el hallazgo de una anotación en la agenda de Marcelo Odebrecht que decía "Aumentar Keiko a 500 e eu fazer visita" (Aumentar Keiko a 500 y yo voy a hacer visita). La empresa brasileña Odebrecht es corruptora confesa de funcionarios gubernamentales y realizó aportes a campañas electorales en Perú.


(Foto de portada: EFE)


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