Mientras en la fiscalía peruana esperan que la próxima semana llegue de Brasil la información oficial que vincula a Keiko Fujimori con el caso Odebrecht, en Curitiba, donde se centralizan todas las investigaciones referidas a Lava Jato, se ha abierto una caja de pandora, con nueva información sobre aportes de la constructora en mención a políticos peruanos en las elecciones del 2006 y el 2011.
El jueves, el jefe de la Unidad de Cooperación Judicial Internacional del Ministerio Público peruano, Alonso Peña, no solo dijo que se había solicitado oficialmente a la fiscalía de Brasil la información sobre Keiko Fujimori, luego de que el procurador brasileño Orlando Martello le confirmó al fiscal de la Nación de nuestro país, Pablo Sánchez, que, en efecto, la anotación en una agenda de los celulares incautados a Marcelo Odebrecht —"Aumentar Keiko para 500 e eu fazer visitar", que reveló IDL Reporteros el 23 de junio— existe; también reveló las circunstancias en que se ha dado todo este proceso:
"A raíz del caso Lava Jato en Brasil se produjeron, no solo en Curitiba, sino en otras ciudades, gran cantidad de allanamientos y se incautaron muchos documentos, parece que hay mucha evidencia que no ha sido procesada y por eso no ha sido enviada a nosotros".
"En Curitiba hay mucho más todavía sin procesar", le dijo un fiscal al tanto de lo que pasa en Brasil al semanario Hildebrandt en sus trece. Es decir que, en efecto, la anotación de Marcelo Odebrecht —que obligará, ahora sí, a la fiscalía a impulsar una investigación exhaustiva sobre Keiko— parece ser solo la punta del Iceberg.
La política de la constructora brasileña, como el mismo Marcelo Odebrecht se lo dijo a los fiscales peruanos el 15 de mayo pasado, era la de financiar a todos los candidatos con opciones de ganar una elección, con el fin de asegurar que los negocios de su constructora se mantuvieran al margen del gobierno de turno.
En los comicios presidenciales 2006, los candidatos con mayor opción fueron Alan García —quien ganó esa elección—, Ollanta Humala y Lourdes Flores Nano. En el proceso electoral del 2011, la disputa fue entre Humala —quien llegó a Palacio ese año—, Keiko Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski. El actual mandatario negó haber recibido dinero de Odebrecht en esa campaña porque "no era uno de los favoritos".
Ahora, a toda esa "evidencia que no ha sido procesada" —Peña Cabrera dixit— hay que sumarle los testimonios de tres nuevos delatores brasileños de Odebrecht que tienen mucho que contar sobre el financiamiento político en el Perú. Se trata de los exejecutivos de la constructora Luis de Meneses Weyll, Luiz Mameri y Rogéiro de Araújo, quienes pueden tener información clave. Los tres eran hombres de Marcelo Odebrecht y estaban por encima de Jorge Barata —exdirector de la firma en Perú— en el organigrama de la constructora.
Luis Alberto de Meneses Weyll, Luiz Antonio Mameri y Rogerio Santos de Araujo, nuevos nombres clave. (El Comercio)
De hecho, el diario La Nación de Argentina, dice que Mameri era el lugarteniente de Marcelo Odebrecht y todas las decisiones sobre las operaciones de la empresa en América Latina pasaban por él.
Además, el diario O Globo de Brasil reveló la semana pasada que los mencionados exejecutivos, además de Barata y Ricardo Boleira, ya han dado declaraciones sobre el Perú ante las autoridades brasileñas.
Según Hildebrandt en sus trece, los procuradores brasileños ya han invitado a sus pares peruanos para analizar la "nueva información" que tienen sobre el Perú, pero el fiscal de la Nación, Pablo Sánchez, aún no define fecha para ese viaje. Peña Cabrera había adelantado que ya se están haciendo las coordinaciones para ello.
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