Después del intercambio de artillería suscitado ayer en la zona desmilitarizada de la frontera, el líder norcoreano, Kim Jong-un adoptó un cuasi-estado de guerra en una reunión con el comité militar central del país. Del mismo modo, instó a sus tropas a estar "listas para el combate".

Por su parte, Seúl afirma que las acciones de discordia comenzaron cuando el norte bombardeó una unidad militar del sur, lo que los obligó a responder con fuego. 

Los altavoces

El ataque se dio como consecuencia a una aviso anterior que prometía destruir los altavoces surcoreanos ubicados en la frontera para proferir discursos críticos al régimen de Pyongyang. 

Sin embargo, Corea del Norte contradice la naturaleza del ataque y afirma que fue Corea del Sur quien efectuó disparos de mortero que cayeron cerca de sus instalaciones militares. 

Es así que la Agencia Central de Noticias de Corea del Norte difundió las determinantes declaraciones del mandatario que exigió a sus tropas estar completamente preparadas para cualquier acción militar a partir de las cinco de la tarde de ayer. 

Además también indicó que varios comandantes ya han sido enviados con urgencia para realizar operaciones de ataque a las instalaciones fronterizas de Corea del Sur.

(Foto de cabecera: latercera.com)