“Ha quedado demostrado en varios casos [...] que las visitas autorizadas por el jefe de Estado a Palacio de Gobierno no son necesariamente visitas a su despacho”, dijo el congresista aprista Mauricio Mulder.
Así explicó que aparezca en el libro de visitas de la Casa de Pizarro, al menos ocho veces, el nombre de la empresaria brasileña Zaida Sisson, involucrada en el caso 'Lava Jato', la mayor investigación de corrupción en la historia de Brasil, que ha salpicado a los tres últimos gobiernos del Perú.
Es decir, Mulder dice que Sisson sí fue a Palacio, pero no se reunió con García, sino solo acompañaba a su esposo, Rodolfo Beltrán Bravo, quien en el segundo gobierno aprista fue, primero, vicepresidente de Agrobanco y, luego, director de Pronamachcs-Agro rural.
Entonces, lo que sí llama la atención, por decir lo menos (claro, siempre y cuando sea cierto lo que dice Muder), es que las esposas de funcionarios acudan a las reuniones de trabajo en Palacio.
Aunque luego Mulder matizó sus declaraciones: "También [acudió] a las reuniones de carácter social, pero que [Zaida Sisson] haya tenido reuniones con el expresidente [Alan García], no tuvo ninguna, estoy en condiciones de poder señalarlo".
Pero lo concreto es que en el libro de visitas de Palacio se consigna al menos dos citas de Sisson con García. El primero fue el 23 de enero del 2007. La empresaria brasileña ingresó a la Casa de Pizarro a las 6:50 pm y se retiró a las 8:18 pm. El motivo: “reunión de trabajo”, según el registro oficial que publicó el congresista Sergio Tejada. El segundo encuentro fue el 4 de marzo del 2008, entre las 09:04 a.m. y 10:09 a.m.
Como se sabe, la Policía Federal brasileña allanó el lunes la casa de Sisson en Sao Paulo, luego de que un colaborador eficaz del caso 'Lava Jato' la sindicara como presunta receptora de US$ 210,000 a cambio de beneficiar a las constructoras Galvao Engenharia y Engevixen con contratos en nuestro país.
INVESTIGACIÓN
Mulder se mostró a favor de que esa denuncia se investigue y alegó que el tema de Lava Jato es un escándalo transversal, porque abarcan casos de corrupción estatal en varios países de América Latina donde funcionan empresas constructores brasileñas en los que además están implicados varios gobiernos.
Por ello saludó que fiscales peruanos hayan ido a Brasil para coordinar la entrega de información de las presuntas coimas de empresas brasileñas en los gobiernos de Alejandro Toledo y Alan García por las obras de la carretera Interoceánica.
TECHO DE VIDRIO
Pero luego el legislador aprista apuntó su artillería al oficialismo y dijo que "mal haría el nacionalismo en disparar a sus vecinos si tiene tremendo techo de vidrio", en alusión a los vínculos del humalismo con el Partido de los Trabajadores de Brasil.
"La propia presencia de lobistas brasileños vinculados sentimentalmente con Rocío Calderón. ¡Qué casualidad! Justo con Calderón que tiene tarjetas en común con Nadine Heredia. Con ese tremendo techo de vidrio que van a querer decir que los actos de corrupción de Brasil que contagian al Perú van a ser solo culpa del gobierno aprista”, manifestó.
En junio pasado, se supo que en 2010 Calderón -quien también se reunió con Sisson- realizó consultorías para la empresa OAS por un monto de US$10,000. Además, se reveló que tuvo una relación sentimental con Marcos de Moura Wanderley, un exdirectivo de la empresa Galvao Engenharia y ex representante legal de Camargo Correa.
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