Como era previsible, el expresidente de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) Manuel Burga salió a negar haber recibido sobornos por ceder los derechos de las próximas cuatro copas América -incluida la actual de Chile- a la empresa Datisa, en el mayor escándalo de corrupción que remece la FIFA.
La investigación federal en curso de la justicia de EEUU señala que 10 presidentes de federaciones de fútbol de Sudamérica habrían recibido US$1.5 millones como sobornos por ceder derechos de la Copa América.
El expediente de la fiscalía general de EEUU publicado en diversos medios sobre este caso señala lo siguiente:
“(Datisa) acordó pagar 100 millones de dólares en sobornos a funcionarios de la Conmebol, que eran funcionarios de la FIFA, a cambio del contrato de la Copa América (acordado en el 2013): 20 millones por la firma del contrato y 20 millones por cada una de las cuatro ediciones del torneo”.
La investigación federal especificó que cada pago de US$20 millones de dólares se dividía en tres millones para el presidente de la Conmebol, tres para el presidente de la asociación de Brasil y tres más para el jefe de la asociación de Argentina.
La Conmebol y la FIFA emitieron comunicados oficiales sobre este escándalo y Burga se excuso de dar mayores detalles, porque pidieron a los dirigentes no pronunciarse. "Pero, eso sí, niego tajantemente haber recibido 1.5 millones de dólares como coima. No fue así", dijo según el El Comercio.
Burga no aparece entre los 14 directivos de la FIFA acusados hasta el momento por EEUU de corrupción (siete de ellos ya detenidos), pero la investigación todavía está en curso, y lo que sí parece tener claro la justicia federal estadounidense es que hubo corrupción en las federaciones sudamericanas, y seguro habrá novedades en los próximos días.
Investigan su gestión
La gestión de Burga en la FPF es auditada por la actual administración que encabeza Edwin Oviedo, quien dijo que pedirá que la investigación se agilice tras conocer las primeras acusaciones de corrupción que hizo EEUU en las federaciones de la región.
Así lo informó el mismo Oviedo desde Zurich, donde participa del Congreso de la FIFA para elegir a su máxima autoridad, en medio del mayor escándalo de corrupción de la historia del fútbol.
El presidente de la FPF dio a entender que no votará por Josep Blatter, quien no piensa declinar su pretensión a una nueva reelección. "Llegué con una idea, pero después de todo esto, vamos a apostar por el cambio", le dijo Oviedo a El Comercio.
Y sobre Burga sostuvo que si la auditoría a su gestión confirma que fue parte del referido tinglado de corrupción en la FIFA, su antecesor deberá asumir las consecuencias. "Si es culpable, tiene pagar", anotó.
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