"Vemos de qué forma nos toman, en realidad no nos escuchan. no les importamos, no tenemos poder Ejecutivo, poder Legislativo que nos represente", dijo, este 25 de diciembre, Susan Quintanilla, presidenta del Comité de Lucha de Trabajadores de la Agroexportación de Ica.
En declaraciones a RPP Noticias, la dirigente señaló que las trabajadoras y trabajadores de Ica están indignados porque no se haya cumplido con el plazo de quince días para elaborar y consensuar un nuevo Régimen Laboral Agrario que les garantice condiciones de empleo digno.
En ese sentido, hizo referencia al vacío legal que se mantiene y que perjudica a los trabajadores agrarios, ya que están siendo tratados como si fueran trabajadores del régimen general, cuando sus condiciones de trabajo son muy particulares.
"Ya hace cuántos días que se derogó la ley [...] aquí los obreros están a merced de las empresas [...] volvieron a la antigua ley y con eso les están pagando; no les alcanza", dijo Quintanilla.
Sobre la propuesta del Poder Ejecutivo de fijar un jornal de 45 soles diarios, la dirigente de Ica rechazó este planteamiento. "Nos parece una burla", dijo Quintanilla. Para la dirigente, ese pago debería ser de 70 soles.
La presidenta del Comité de Lucha de Trabajadores de la Agroexportación de Ica argumentó que las personas que laboran en este sector requieren de un salario mínimo mayor a la Remuneración Mínima Vital (RMV), ya que realizan esfuerzo físico y las condiciones son las de un trabajo de riesgo.
"[El trabajador está] expuesto al sol y sobre esforzado, y de acuerdo a eso pedimos que se nos pague. Es un trabajo de alto riesgo, porque hay sustancias tóxicas y a veces tienen que cargar gran peso [...] entonces merece una remuneración especial", dijo.
Uno de los problemas de este conflicto socio-laboral es la ausencia de organizaciones representativas de los trabajadores. La tasa de afiliación sindical en el sector es menor a 4%. Esto explica la diversidad de posiciones y propuestas de los trabajadores, que en su mayoría están ubicados en Ica y La Libertad.
En base a un estudio de especialistas en temas laborales, la mayor central sindical del país, la CGTP, propone un salario mínimo para el sector agrario equivalente a 1,5 RMV. Por su parte, la Federación Nacional de Trabajadores Agroindustriales (Fentagro) exige que las gratificaciones y la CTS se paguen aparte de los jornales, para que no se sigan desnaturalizando estos beneficios laborales.
Este sábado, la Comisión de Economía del Congreso está debatiendo el texto de un proyecto de nuevo Régimen Laboral Agrario. Esta discusión continúa tras la inasistencia de la mayoría de congresistas de esta Comisión, lo que impidió que se debata el pasado 24 de diciembre.
El pasado 20 de diciembre, el Pleno del Congreso no se puso de acuerdo sobre una nueva ley y votó a favor de regresar el proyecto a la Comisión de Economía. Anteriormente, el pasado 4 de diciembre, tras una semana de protestas de trabajadores agrarios, el Congreso derogó la Ley N° 27360, el antiguo Régimen Laboral Agrario prorrogado por el expresidente Martín Vizcarra hasta el 2031.
En los últimos veinte años, los trabajadores agrarios han denunciado un régimen al que consideraban discriminatorio, ya que se les estuvo pagando los beneficios laborales incluidos en los jornales que eran de 36 soles diarios como mínimo.
Además, mientras las empresas agroexportadoras multiplicaban sus millonarias ganancias, los salarios de los trabajadores se mantuvieron estancados y solo subían cuando se aumentaba la RMV.
[Foto de portada: La Tercera]
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