En el 2018, el Poder Ejecutivo firmó el tratado internacional más conocido como Acuerdo de Escazú. Este acuerdo entre países de América Latina y el Caribe está relacionado al acceso a la información, participación pública y justicia ambiental. Si bien fue aprobado hace ya dos años, para su ratificación hace falta que el Poder Legislativo vote y lo apruebe en el Pleno.
Si bien en los últimos dos meses la campaña de información sobre la necesidad e importancia de este acuerdo parecía haber ganado el debate de argumentos, parece que esto no ha podido convencer a los congresistas. Al menos así ocurre en la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso. El presidente de este grupo parlamentario, Gilmer Trujillo (Fuerza Popular), le dijo al diario La República que el Acuerdo de Escazú no se aprobaría hasta la última información de acuerdo a lo que ha podido notar en las intervenciones de los parlamentarios.
"De acuerdo a cómo intervinieron a lo largo de las sesiones los congresistas que integran la comisión, me parece que por amplia mayoría va a ser rechazado el Acuerdo de Escazú”, dijo el congresista.
Según Trujillo, a favor del Acuerdo de Escazú estarían las bancadas Frente Amplio y Partido Morado. Acción Popular, Frepap, Alianza Para el Progreso, Podemos Perú, Somos Perú, Fuerza Popular y UPP estarían en contra, según el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso. Esta es la impresión del congresista tras 13 sesiones virtuales de la Comisión en las que se discutió el tema.
Ante ello, se ha reactivado la campaña #EscazúAhora para seguir juntando firmas para pedirle al Congreso que ratifique este importante tratado internacional. El pasado 9 de octubre, la Plataforma Escazú Ahora Joven entregó al Congreso 6,650 firmas de la población, recolectadas a través de la plataforma Change.org.
Según esta plataforma, que reúne a 38 organizaciones juveniles, el Acuerdo de Escazú es un instrumento jurídico que va a fortalecer nuestra democracia ambiental y va a visibilizar a los defensores ambientales.
Para Kiara Ordóñez, representante de esta plataforma ciudadana, el Acuerdo de Escazú es una oportunidad para que las autoridades demuestren su compromiso con un modelo de desarrollo sostenible, así como con la consolidación de la democracia y la disminución de conflictos socioambientales.
"La calidad de vida de sus hijos e hijas, así como de las generaciones que les acompañan, está en juego, si es que no construimos las herramientas que les permitan decidir sobre su futuro. Esperamos que tomen en cuenta nuestra voz, considerando que en nuestra diversidad encontramos también vulnerabilidad”, afirmó.
Ante la aparente dejadez del Congreso en este tema, Ordóñez agregó:
"Esta decisión evidenciará el interés del Congreso actual en contribuir a resolver la crisis ambiental y climática que vivimos, y marcará un legado para las futuras generaciones".
Señaló que la ratificación del Acuerdo de Escazú permitirá la protección de personas defensoras de derechos humanos y defensoras ambientales, entre los que se encuentran líderes de pueblos indígenas y dirigentes de comunidades campesinas. Hasta setiembre pasado, se pudo contar al menos cinco asesinatos defensores ambientales en Perú.
[Foto de portada: Andina]
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