Los peritos de la Dirección de Seguridad del Estado de la Policía Nacional ya tienen las primeras conclusiones sobre lo que provocó la tragedia en Villa El Salvador el 23 de enero último, cuando un camión cisterna que transportaba gas licuado de petróleo (GLP) provocó una deflagración que provocó la muerte de 15 personas y dejó más de 50 heridos.
Según las pericias, fueron tres los factores que confluyeron: el desnivel de la vía por donde transitaba la pesada unidad, la falta de mecanismos de seguridad en el vehículo y la imprudencia del chofer desataron la deflagración en un radio de 250 metros provocada por la fuga de GLP.
El informe señala como "factor determinante" de la tragedia un desnivel en la calzada del cruce de las avenidas Mariano Pastor Sevilla y Villa del Mar. "El desnivel [de 1,80 metros de longitud y 55,5 cm de altura] tiene 16 grados, cuando no debía ser mayor de 12", explicó el coronel José Gutiérrez Mori, citado por El Comercio.
La pericia también concluye en que hubo imprudencia del chofer Luis Guzmán Palomino (72), a quien este lunes el Poder Judicial liberó bajo comparecencia restringida, al pasar por el desnivel y transportar GLP con un vehículo que no tenía los mecanismos de seguridad necesarios.
Guzmán tampoco acredita haber sido capacitado para el transporte de sustancias peligrosas, en tanto su abogado explicó que el trabajo de su cliente era abastecer con combustible el tanque interno del vehículo, y no transportarlo.
Por último, el informe pericial señala como tercer factor el mal estado del vehículo de placa A2X-847 y de propiedad de la empresa Transgas LG E.I.R.L., que no tenía la barrera protectora debajo de las válvulas y ductos por donde pasa el GLP, ni los mecanismos de bloqueo automático al detectar fugas.
El Reglamento para la Comercialización de Combustibles Líquidos y Derivados de los Hidrocarburos (D.S. 030-1994) —que el Organismo Supervisor de la Inversión en Energía y Minería (Osinergmin) debe hacer cumplir—, dice que en esos camiones cisterna "el tanque, las tuberías, las válvulas y las mangueras deberán mantenerse en perfecto estado y sin presentar filtraciones", además de contar con un extintor contraincendios y otras medidas.
Pero la norma no menciona como requisito contar con una barrera protectora debajo de las válvulas y ductos para evitar lo que sucedió en Villa El Salvador, es decir, que el golpe con la calzada desnvelada produzca roturas y fugas de gas.
Expertos en el tema señalan que se trata de un vacío en el reglamento, al igual que la prohibición de que estos circuitos estén debajo de los tanques de GLP en lugar de ir arriba de la cisterna, como se obliga en Brasil.
De otro lado, Marine Consultants, empresa acreditada por el Instituto Nacional de Calidad (Inacal), fue la que certificó a mediados del 2019 el tanque a presión del camión siniestrado. Según su gerente general, César Salermo, su empresa fue contratada para acreditar el buen estado del tanque, pero no los ductos ni las válvulas ni la carrocería.
La investigación policial acusa al chofer Guzmán Palomino de homicidio culposo, lesiones graves y daños materiales, e incluye también a su hijo, que es gerente de Transgas, Luis Guzmán Escriba, y a representantes de la Municipalidad de Lima, de la Municipalidad Distrital de Villa El Salvador y del Osinergmin. El documento ya fue remitido a la fiscalía y el Poder Judicial para que tomen las medidas del caso.
DATO
◉ Las víctimas de la deflagración denunciaron que no están recibiendo ayuda de La Positiva Seguros, empresa que aseguró al camión cisterna, señaló El Comercio.
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