La Asociación de Concesionarios de Transporte Urbano (ACTU) de los corredores complementarios anunciaron la suspensión de sus servicios, en un comunicado, en el que alegan que toman esta decisión por la "mala gestión" de la Municipalidad de Lima. Los corredores viales son los que conectan la ciudad con los medios masivos de transporte, como el Metro de Lima y el Metropolitano.

En la capital funcionan en estos momentos cinco corredores viales: el Azul (Tacna-Garcilaso-Arequipa), el Rojo (Javier Prado-La Marina) y el Morado (San Juan de Lurigancho-Magdalena), que son en la práctica el único avance concreto en la reforma del transporte en una ciudad que ya es la tercera del mundo con el tráfico más caótico, después de Mumbai (India) y Bogotá (Colombia).

"No al alza de pasajes por la incapacidad de los funcionarios de la Municipalidad Metropolitana de Lima. Por un transporte formal y de calidad para los usuarios", se lee en el documento difundido en redes sociales.

El único corredor que quedaría activo es el verde (Carretera Central), que opera una empresa que tiene vínculos con investigados por narcotráfico en el Vraem, según denunció El Comercio. Se trata de consorcio Contranscar, que integran 10 firmas y que en 2014 ganó la concesión del citado corredor. 

En conferencia de prensa, la ACTU precisó que como primera medida se ejecutará la suspensión del servicio este jueves hasta las 8 a.m. "De ahí continuaremos con nuestros servicios de manera normal. Pedimos mil disculpas a los usuarios y tomen sus previsiones", dijo en conferencia Ángel Mendoza Aguirre, el gerente general del gremio de operadores.

Agregó que hasta el momento Protransporte no ha cumplido con ejecutar la exclusividad de las vías concesionadas, el retiro de transporte informal, la modificación de los recorridos de rutas de Lima y Callao para que puedan circular los corredores complementarios, entre otros.

Los concesionarios alegan por ello que hay una gestión ineficiente de la comuna de Lima, que va en perjuicio de la ciudad y de las empresas que prestan el servicio, en alusión a los 'colectivos piratas' que invadan las rutas de la capital en abierto desafío a las autoridades ediles.

Previamente, el mismo Mendoza dijo que los servicios de corredores complementarios están en una crisis total, y señaló que la medida de suspensión es un primer paso de alerta. 

"Nosotros apostamos por darle a los usuarios un mejor servicio de transporte digno y de calidad; sin embargo, los corredores han sido invadidos por la informalidad y el servicio cada vez va decayendo", dijo en RPP.

En efecto, a diario, miles de unidades informales invaden las rutas de los corredores complementarios. Operan de manera organizada, cobran cupos por el derecho de circulación y hasta usan sistemas de comunicación para evadir los controles municipales.

La ONG Luz Ámbar, estima que solo en Lima y en Callao existen unas 100 mil unidades –entre autos, camionetas y vans– que se utilizan para prestar este ilegal servicio de transporte de pasajeros.

"Tienen grupos de WhatsApp y por ahí se avisan cuando ven a un inspector edil. Además, cobran cupos por inscripción y una cuota diaria. Otros le ponen sticker a los carros para reconocerse", dijo hace poco Luis Quispe Candia, de la Luz Ambar, citado por Perú21.

Servicio ineficiente

Además de la informalidad, otro aspecto que afecta a los operadores de esos corredores viales es que su servicio es ineficiente en cuanto a fluidez y rapidez, señala Mariana Alegre, de la ONG Lima cómo vamos.  

"Las malas prácticas de organización de las calles, la congestión y el tráfico origina que los buses vayan lento, por eso algunas personas prefieren no utilizarlos y abordar taxis, colectivos u motos. Es un tema de tiempo", dijo en El Comercio.

Según una encuesta del 2019 de esta organización, cuyos resultados se publicarán este jueves, la velocidad mínima del corredor azul es de 7,2 kilómetros por hora. "Más rápido se va en bicicleta. Este factor es uno de varios que afectan el servicio, por lo tanto hace que haya menos pasajeros y menos sostenibilidad económica para los operadores", insistió Alegre.

¿Qué dice la ATU?

Hace poco, María Jara, la actual directora ejecutiva de la Autoridad de Transporte Urbano (ATU), anunció que un plazo de un año y medio desaparecerían las combis de Lima y serían sustituidas por otro tipo de transporte masivo, con concesiones similares a los corredores complementarios.

De otro lado,  hay un proyecto de la la Municipalidad de Lima pendiente de revisión y aprobación en el Congreso para sancionar con cárcel a aquellos choferes que acumulen papeletas de tránsito.  La iniciativa propone que estos conductores sean sentenciados con una pena no mayor de dos años. Si son de transporte público, la pena llegaría a los cuatro años.

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