El presidente Martín Vizcarra, desde Pucallpa y cuatro días después de disponer la disolución del Congreso, en atribución a las facultades que le da la Constitución del Perú, habló este viernes sobre la medida histórica que tuvo que tomar ante el entrampamiento político e institucional que hacía insostenible la gobernabilidad del país.
"Ratifico desde aquí para todo el país que todas las decisiones han sido respetando escrupulosamente a la democracia y Constitución. También fueron decisiones difíciles pensando en el país y en los peruanos"
El jefe de Estado agregó que con la convocatoria a elecciones congresales, para el 26 de enero de 2020, se espera "dar por superado esta etapa de confrontación", y que de ahora en adelante todos debemos poner nuestro esfuerzo y tiempo en el desarrollo del país.
Pero probablemente serán cuatro meses ─hasta los referidos comicios─ de un tira y afloja, porque el fujimorismo y sus aliados, como amenazaron, no se quedarán de brazos cruzados y buscarán la forma de no perder sus curules y gollerías. Y como primer paso, buscarán interponer una demanda competencial junto a una acción de amparo ante el Tribunal Constitucional, aunque es probable que esos recursos no prosperen porque parten de un acuerdo de la Comisión Permanente que carece de validez jurídica, como han explicado expertos.
Sea como fuera, Fuerza Popular cada vez tiene menos margen de maniobra, por el consenso nacional e internacional en el sentido de que la decisión de disolver el Congreso se ajusta a la ley y la Constitución. Por tanto, no hay nada que indique que estemos frente a un golpe de Estado como lo sostienen los excongresistas que están en una etapa de negación y vienen dando tumbos en su afán por buscar deslegitimar una medida que además tiene un amplio respaldo ciudadano.
De hecho, el ratificado ministro del Interior, Carlos Morán, reiteró este viernes que estamos ante un gobierno constitucional y que Martín Vizcarra es el "presidente en ejercicio".
"El Gobierno está funcionando. Ayer (jueves) ha jurado un nuevo gabinete y estamos empezando una nueva tarea. En cuatro meses habrá elecciones legislativas, están funcionando los órganos electorales", comentó en Canal N.
"Hay un reconocimiento de la prensa internacional. Nadie condena estas elucubraciones tremendistas e irresponsables de que hay un golpe de Estado. La Policía ha actuado con ponderación. No tiene ningún punto de comparación con el pasado oscuro que tuvimos el 5 de abril de 1992".
Morán parecía aludir a las repercusiones que ha tenido la disolución del Congreso peruano en la comunidad internacional. Ni los organismos del hemisferio ni la prensa extranjera ha hecho eco de la pataleta fujimorista. De hecho, el diario El País de España, en su editorial de este viernes, señala que el presidente Vizcarra se ha "ceñido a la ley".
"La grave crisis institucional que vive Perú debe resolverse siguiendo las normas constitucionales que avalan al presidente, Martín Vizcarra, en su decisión de disolver el Congreso y convocar elecciones legislativas para que sean los votantes quienes tengan la última palabra en el rumbo político que debe adoptar el país andino", dice el texto.
En tanto, el jefe de la OEA, Luis Almagro, saludó la designación del diplomático de carrera Gustavo Meza-Cuadra como nuevo canciller peruano, lo que además es un aval tácito al gobierno de Martín Vizcarra.
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