El presidente Martín Vizcarra descartó este viernes el uso de la fuerza para solucionar el conflicto minero en Las Bambas, al reiterar que su gobierno está abierto al diálogo para hallar una salida al problema en el marco de la democracia y el estado de derecho.  

"La democracia es el sistema que permite resolver conflictos sin violencia en base al diálogo y la concertación", comentó en su discurso durante la ceremonia de juramentación de Zoraida Ávalos como fiscal de la Nación. Pero Vizcarra subrayó también que su gobierno mantiene una posición firme "contra la violencia, la delincuencia y la extorsión". 

El jefe del Estado ratificó además su compromiso de seguir trabajando por el desarrollo de los pueblos más pobres del país, y citó como uno de los ejemplos de ello a la región Apurímac, escenario actual de una controversia entre la comunidad de Fuerabamba y el proyecto minero Las Bambas.

"Somos conscientes de las demandas largamente postergadas y que como Estado debemos atender; garantizo por ello apertura y diálogo para encontrar los mejores caminos de solución, pero al mismo tiempo tenemos que ser firmes contra la violencia, la delincuencia y la extorsión".

Miembros de la comunidad de Fuerabamba mantienen un bloqueo en la única vía de acceso, en Yavi Yavi, a la minera Las Bambas para trasladar su producción de cobre al puerto de Matarani, en demanda de una compensación económica.

La semana pasada, las autoridades judiciales ordenaron la detención preliminar del dirigente de Fuerabamba, Gregorio Rojas, y de los asesores legales de la comunidad, los hermanos Frank y Jorge Chávez Sotelo, tras ser acusados por la Fiscalía de incentivar el escalamiento del conflicto con el objetivo de obtener beneficios económicos. La demanda de esta comunidad es no dialogar hasta que los detenidos sean liberados. El primero, sería liberado en las próximas horas.

Ante esa situación, el Ejecutivo envío al Cusco una comitiva de alto nivel, con tres ministros de Estado y altos funcionarios, para dialogar con los representantes de las comunidades de Chumbivilcas y buscar una salida pacífica a la controversia. En principio, ambas partes acordaron ayer volver a sostener una reunión el próximo 9 de abril en Lima a fin de continuar con el diálogo.

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