Seis miembros de la Comisión Lava Jato interrogaron al presidente Pedro Pablo Kuczynski el viernes en Palacio de Gobierno por más de siete horas sobre sus vínculos negados con Odebrecht, pero las respuestas del mandatario al respecto no convencieron, según los legisladores presentes en la diligencia, que estuvo pendiente durante varios meses y que se realizó finalmente a seis días del debate del segundo pedido de vacancia presidencial.
En la víspera de la esperada diligencia se había filtrado un informe de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) que reveló no solo extrañas transferencias bancarias de PPK a su chofer personal y a su escudero parlamentario, Gilbert Violeta, que no han sido aclaradas, sino también que el mandatario se benefició de las asesorías que su empresa Westfield Capital le dio a Odebrecht mientras fue ministro en el gobierno de Alejandro Toledo.
Los congresistas que interrogaron a Kuczynski coincidieron en que sus respuestas no convencieron y en muchos casos fueron evasivas. PPK, dijeron, tampoco pudo demostrar que, en efecto, existió una "muralla china" entre él y su socio, el chileno Gerardo Sepúlveda, quien según el mandatario gestionó Westfield mientras él fue funcionario.
"Las respuestas (del presidente) fueron demasiado obvias, en el sentido que de dijo que hubo ‘muralla china’, ‘no sé nada’, ‘pregúntenle a Sepúlveda’, él puede haber usado ese dinero (...) él ha mantenido la posición negacionista", dijo el legislador aprista Mauricio Mulder, tras la diligencia en Palacio.
La presidenta de la Comisión Lava Jato, Rosa Bartra, resaltó el hecho de "haber obtenido, por fin, luego de siete meses de espera, la declaración del presidente", y se refirió, sin detalles, de "una serie de datos nuevos" sobre "operaciones bancarias ya oficialmente conocidas".
La legisladora fujimorista anunció que se incluirá en el expediente la información financiera del documento de la UIF, sobre contratos de asesorías con las empresas brasileñas y los proyectos que se investigan como Iirsa Norte, Iirsa Sur, Irrigación Olmos, Transportadora de Gas del Perú y otros. De hecho, el citado reporte de la UIF en manos de Comisión Lava Jato evidencia que "muralla china" en la práctica no funcionó.
El legislador Humberto Morales, del Frente Amplio, adelantó que solicitará PPK pase a condición de investigado porque sus explicaciones sobre su relación con Odebrecht no convencieron.
El congresista acciopopulista Víctor Andrés García Belaunde se quejó de que los abogados de Kuczynski plantearon reiteradas veces objeciones a las preguntas, con lo que impidieron que el jefe de Estado responda, por ejemplo, sobre aportes a su campaña electoral.
El mismo PPK se pronunció escuetamente a través de su cuenta de Twitter sobre la diligencia.
Gonzalo del Río, uno de los abogados del mandatario en el interrogatorio, dijo que quedó se logró demostrar Kuczynski nunca firmó un solo contrato de asesoría a Odebrecht cuando fue ministro, porque todo lo gestionó su socio Sepúlveda."Sus explicaciones fueron bastantes solventes", alegó.
Del Río subrayó que los "funcionarios están obligados a renunciar a actividades lucrativas, pero no están obligados a renunciar al patrimonio que generan, por ejemplo, las empresas de su propiedad". Así el abogado parecía aludir al informe de la UIF que confirma las transferencias monetarias de Odebrecht a Westfield, fondos que además usó para su beneficio personal (pagar parte del crédito con el que PPK compró su casa de San Isidro y su tarjeta de crédito).
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