No solo es sexista, xenófobo y racista. Ahora el presidente de EEUU, Donald Trump, ha otra dado otra muestra de sus complejos y fobias, al suspender la orden de abrir las fuerzas armadas a las personas transgénero, que debía entrar en vigor este sábado.
La medida, que supone otro golpe a la política de integración impulsada por Barack Obama, aplaza hasta el 1 de enero la prohibición de reclutarles, bajo la excusa de solicitar un estudio que determine si su ingreso daña la efectividad bélica de las tropas.
El actual secretario de la Defensa, el teniente general James Mattis, justificó a sí la polémica decisión de la Administración Trump:
"Desde que estoy en el puesto he enfatizado que el Departamento de Defensa debe medir cada decisión política con un estándar crítico: ¿afectará a la disposición y letalidad de las fuerzas? Dicho de otro modo, ¿cómo influirá en la capacidad militar de defender la nación?".
Aunque la orden del Pentágono no afecta a los ya reclutados, sí abre la ventana a un endurecimiento de sus condiciones en los cuarteles. Según la Asociación de Médicos de Estados Unidos (JAMA, por sus siglas en inglés), cerca de 13.000 transexuales ya pertenecen al Ejército (1%) y que los médicos militares no están preparados para atenderlos y mucho menos para asegurar su correcta transición.
El centro de estudios sexuales Palm Center, que colabora con el Pentágono, se pronunció al respecto en un comunicado que dice a la letra:
"La decisión del general Mattis de mantener la prohibición de reclutar personas transgénero tendrá el efecto de que mientan en su intento de ingresar en las fuerzas armadas. Lo mismo ocurría antes con los homosexuales y la política del ‘no preguntes, no cuentes'. Todo esto carece de sentido porque, como predijeron todos los estudios, los transexuales han demostrado con creces su capacidad de servicio".
Lee también:
El Supremo de Estados Unidos aprueba buena parte del veto migratorio de Trump
Trump propone construir un muro con paneles solares para que le cueste menos a México
Justin Trudeau se parece tanto a Donald Trump en políticas ambientales
Shane Ortega, el primer transexual del Ejército de EEUU que lucha por cambiar el sistema