¿Cómo se forma la personalidad de un feminicida? ¿Qué piensa un hombre antes, durante y al finalizar un asesinato contra una mujer? ¿Quiénes contribuyen en el fortalecimiento de las mujeres y hombres machistas? LaMula.pe consultó con el psiquiatra Carlos Bromley Coloma, quien asegura que nuestra sociedad refuerza la supremacía de los varones.
“Nuestra sociedad aún mantiene las características de un modelo social desigual en donde el poder masculino está por sobre y encima del poder femenino. Las causas son sociológicas e históricas. Desde la antigua civilización el hombre proveía al hogar a través de la caza, por ejemplo; mientras que la mujer criaba a los hijos. Se impuso el masculinismo sobre el feminismo y esto se mantiene hasta hoy”, dice.
En su opinión, en los hogares peruanos hay preferencias por los hijos, a quienes se les atiende primero y mejor respecto de una hija (por ejemplo, a la hora de la alimentación), también se les da o permite libertades que a ellas no, y más bien se les dice que las labores de la casa y atención a la familia debe ser tarea de ellas. De hecho, los estereotipos no permiten el desarrollo humano de las personas.
“Para acabar con el machismo hay que imponer una política de estado y proigualdad que debe ser parte de la formación y la educación de los niños y niñas como en otros países. Son características que van formando nuestra personalidad como el colegio, casa y la calle. Lo primero que hay que hacer es que la mujer y el hombre entiendan que uno de los aprendizajes que marca al ser humano es el aprendizaje por modelo. Si la madre se deja limitar, ellos aprenden que la madre es la que 'tiene' que salir al mercado todos los fines a comprar mientras el padre se queda en casa viendo televisión, por ejemplo, es desigualdad”, explica.
La enseñanza oportuna de los derechos humanos, el estudio de las libertades, el concepto de la igualdad, de la solidaridad, de la empatía en los colegios es imprescindible como en otras ciudades del mundo para vivir en armonía.
‘AMOR’ POSESIVO
El Perú es un país en donde el machismo se ejerce a diario a través del amor posesivo y controlador que finalmente terminaría en la muerte.
“El amor machista implica posesión. 'Si yo te amo, te poseo, y hago lo que quiero contigo’. Los hombres pretendemos que las mujeres hagan lo que nosotros queremos desde el colegio. Somos muy mandones y muchas mujeres crecen sumisas creyendo que el hombre 'manda' en la casa. El hombre pide y la mujer da. Y lo peor es que no hay nadie en el colegio que le diga que eso está mal. Cuando uno permite algo lo refuerza”, señala Bromley.
El psiquiatra recalca que la crianza de los hombres y mujeres es distinta, y que ello es mucho más perjudicial para la salud mental de hombres y mujeres si los hogares son disfuncionales. El especialista explica que estos hogares son el cultivo para reforzar el machismo.
¿Qué hacer, entonces, cuando desde jóvenes los varones ven que sus padres acosan a mujeres, cuando se les incentiva a tener relaciones sexuales desde temprana edad, cuando los padres hacen de la vista gorda si el adolescente acosa a la empleada del hogar o a otra mujer? ¿Cuántos hogares aún forman a sus hijas como obedientes y se les restringe sus libertades?
“La empatía consiste en ponerte en los zapatos del otro y eso no está ocurriendo en nuestro país. Se cría a los hijos bajo el principio de que los hombres son superiores a las mujeres y hay conceptos equivocados reales”, dice.
“Al hombre se le cría en la adolescencia sin ninguna restricción sobre la sexualidad. Entre compañeros, con sus padres es normal hacer bromas machistas, en las calles, entre hombres, no se respetan las edades. He visto a un hombre con un niño de 14 años y al ver pasar a una chica, lo primero que hace el adulto es acosarla y entre comillas lanzarle un piropo. Le dice al chico: 'Ta buena la chica, ¿no?' Y empiezan con el acoso callejero y lo hacen delante de los hijos, les hablan con libertad de la sexualidad. También están los padres que inducen a sus hijos a su inicio sexual como llevándolos al prostíbulo o les contratan prostitutas. En los hogares pudientes no ven mal que el adolescente de 14 años hostigue sexualmente a la empleada, a la trabajadora del hogar. Esa vulneración a la empleada es un acto cruel, machista y ocurre frente a la madre. No dicen nada porque es mejor a su hijito contraiga enfermedades de transmisión sexual en la calle. Lo peor es que en la televisión siguen repitiendo ese modelo de la actitud machista vendiendo la imagen de que la empleada se enamora del patrón”, comenta.
"Formando hijos machistas están creando futuros feminicidas", finaliza Carlos Bromley.
Mientras se continúe fortaleciendo el machismo en nuestras mentes desde que nacemos, seguirán existiendo los feminicidas.
DATOS:
- Solo algunas las mujeres las que han preferido dejar este “círculo de la violencia” para poder desarrollarse como madres y seres humanos a plenitud. El Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) reveló que el 24% de las madres peruanas asume sola la responsabilidad de la crianza de sus hijos, es decir, 1 millón 200 mil madres son las denominadas “madres solteras”. De esta cifra, el 50% de las madres peruanas tuvo su primer hijo o hija antes de los 22 años de edad. Y son más de 8 millones de madres de familia las que existen en todo el Perú. Muchas de ellas salen agotadas de la jornada laboral para llegar a sus hogares a seguir trabajando, atendiendo a sus hijos.
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