Entrega su pasaporte y boleto de avión a un agente de control de seguridad. Confirman su identidad y escanean el ticket, pero la máquina no lo reconoce. Se puede percibir su nerviosismo. Vuelven a hacer el procedimiento y le dan la conformidad. El empresario Guillermo Riera recoge su maleta de mano y se dirige hacia control de Migraciones para tomar el vuelo 2462 de la aerolínea Latam con destino a Miami. 

Así se confirmó, en un video difundido por Latina, la salida del sospechoso de arrollar en la Costa Verde con su camioneta a cuatro personas que se desplazaban en dos motocicletas, la madrugada del 5 de mayo último, a la altura de Barranco. Tres de ellas fallecieron: una joven pareja de novios, y un agente de serenazgo. El colega de este se debate entre la vida y la muerte. Tan solo 10 horas después de este fatal accidente, Riera se ponía lejos del brazo de la justicia.

Antes el empresario envió a un trabajador de su empresa, identificado como Alberto Yarlequé Purizaga, para hacerse responsable del accidente y a las pocas horas se descubrió que todo era mentira. Además, se hallaron los documentos personales de Riera en una playa de Barranco, cerca del lugar del accidente. Y su salida del país lo terminó de delatar.

El sospechoso señaló ante Migraciones que se iba a quedar un mes en Estados Unidos, pero solo llevaba una pequeña maleta de mano y no tenía equipaje en bodega.

No hay denuncia

Entre tanto, el Ministerio Público aún no formaliza la denuncia contra Riera Díaz. El abogado de los deudos, Álvaro Peláez, dijo que la Policía Nacional no envió la documentación a la fiscalía de tránsito sino a la fiscalía de turno. “Ello no permite iniciar la investigación y tampoco realizar las  diligencias necesarias”, dijo a El Comercio.

Según el reporte de Migraciones, el destino final del empresario es Los Ángeles, previa escala en Miami. Riera compró un pasaje de ida y vuelta, y su regreso está previsto para el 5 de junio, aunque la policía cree que este buscaría llegar a otro país para evitar la extradición.

Familiares de los jóvenes novios que murieron embestidos por la camioneta de Riera denunciaron además irregularidades en la investigación pues señalaron que el testimonio de Yarlequé Purizaca demuestra que el empresario quiso evadir su responsabilidad. “El señor dijo primero que él estaba al volante del vehículo y luego confesó la verdad, que se autoinculpó  porque era su jefe y le debía favores”, dijo uno de los deudos.

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