En la última edición de la revista Caretas, publicada el jueves 7, el excandidato presidencial Julio Guzmán, excluido de forma polémica por el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), hizo la siguiente revelación:
"En las semanas en las que se desencadenaban los hechos, miembros de mi equipo de campaña recibieron al menos tres visitas de inusuales mensajeros con un inusual mensaje: el cambio de opinión de la autoridad electoral a nuestro favor nos costaría unos ‘honorarios profesionales’, altos y en efectivo. ¿Se trató de verdaderos intermediarios o simples oportunistas? Solo la historia, que estoy seguro se develará, nos lo dirá. ¿Qué pensaría usted si el viernes 11 de marzo, a solo tres días de la resolución final del JNE que nos excluía del proceso electoral, uno de esos mensajeros le pide seiscientos mil dólares para ‘arreglar’ el asuntito?".
La denuncia, hecha en un contexto en el que Guzmán ha anunciado que publicará un libro sobre su experiencia en la última campaña electoral, había pasado desapercibida durante estos días.
Esto fue así hasta que el propio JNE, a través de su Procuraduría Pública, envió al día siguiente un oficio a la Fiscalía Provincial Penal Corporativa Especializada en Delitos de Corrupción de Funcionarios de Lima, en el que pide se investigue esta denuncia.
El mismo presidente del JNE, Francisco Távara, anunció que el organismo electoral ha interpuesto la medida; pero al mismo tiempo no dejó de criticar a Guzmán por esta declaración a Caretas.
“No permitiremos que se dañe la imagen del Jurado Nacional de Elecciones. Creo que (Guzmán) debe ser más serio en sus imputaciones. La pregunta es ¿por qué no lo denunció en su momento? Es una denuncia bastante antojadiza y maliciosa orientada a publicitar el libro que está preparando (...) El señor Julio Guzmán debe ser más responsable en su actuación como político si quiere aspirar a ser Presidente de la República. Debe mantener el respeto a las instituciones del Estado, que caracteriza a toda persona democrática".
Más allá de esta declaración de Távara, en la que saca la cara por el JNE, ¿se sabrá, finalmente, por qué el máximo ente electoral tuvo un criterio distinto para algunas agrupaciones políticas y otro para las demás, tratándose de la misma infracción? La verdad debe salir a la luz.
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