Alrededor de las 10 de la noche del domingo 24 de abril unos disparos perturbaron la tranquilidad de una de las zonas más turísticas de Acapulco. Y es que un cártel local emprendió un feroz ataque contra las bases de la Policía Federal, disparando contra un hotel donde se alojaban los agentes y contra un centro comercial, ubicado en la misma calle donde los efectivos de seguridad tienen sus oficinas. 

Es así que el ruido de las armas, las persecuciones y el tránsito cerrado sembraron el caos en la ciudad. Como consecuencia, los saldos fueron un supuesto narcotraficante abatido y un policía herido con un balazo en la pierna. En ese sentido Xavier Olea, fiscal de Guerrero, el estado donde está Acapulco, la ciudad más desestabilizada por el crimen organizado, indicó:

"Esto es lo que está aconteciendo, pero yo le diría a la ciudadanía que tenga calma".

Este nuevo episodio evidencia la profunda crisis de seguridad que atraviesa el balneario y muestra la táctica de tratar de ocultar este tipo de enfrentamientos para conservar la imagen del puerto turístico, rebajando así la importancia de los hechos criminales. 

Como prueba de ello, hace solo dos semanas el gobernador del estado, Héctor Astudillo, le reclamaba a sus propios ciudadanos que dejen de difundir estas noticias: 'Hablen bien de Acapulco, ayúdennos para que la gente quiera regresar'.

Sin embargo, anoche quedó claro que los vecinos del recinto turístico hacen caso omiso a la sugerencia de su gobernador, y prefieren que se conozca lo que sucede fuera de sus casas. Es así que de inmediato colgaron videos ciudadanos en las redes sociales que mostraban la confusión, los disparos y el horror de la violencia. 

El primer ataque se dio a las 21:45 en el Hotel Alba Suites, donde se alojaban varios miembros de la Policía Federal. Los agentes lograron repeler el ataque ahuyentando a los criminales rápidamente. Allí fue donde murió uno de ellos, mientras que un policía resultó herido. Pocos minutos después comenzó otra ofensiva, esta vez en el centro comercial donde la Federal tiene sus oficinas locales. Este suceso, que no dejó heridos pero sí un ambiente de pánico, obligó a que los establecimientos cerraran sus puertas y los clientes permanecieran echados en el piso hasta no oír más disparos. 

Según estima el fiscal Olea, este ataque podría tener que ver con la detención de algún líder criminal, aunque no dio detalles al respecto. 

Y es que este fin de semana fue arrestado el narcotraficante Freddy Del Valle, más conocido como El Burro, un supuesto cabecilla de uno de los cárteles que se disputan violentamente el control de Acapulco. 

El recinto turístico es considerado un centro importante a nivel económico, por lo que las bandas criminales se disputan por controlar la venta y distribución de la droga y el cada vez más lucrativo sector ilegal de la extorsión a empresarios, además de la prostitución. 

Es importante tener en cuenta que solo en el 2015 se dieron 903 asesinatos en Acapulco, es decir 104 por cada 100 mil habitantes, la cifra más elevada de México y una de las mayores en América Latina. 

(Con información de elpais.com)

(Foto de cabecera: EFE)