Las altas matrículas para inscribirse en la educación superior en Estados Unidos ha contribuido a crear la posible siguiente "burbuja" financiera como consecuencia de la deuda estudiantil. 

Y es que los estadounidenses que ya poseen su título universitario, acumulan una deuda total que llega a los 1,2 billones de dólares. Esto podría significar una grave amenaza para la economía del pais. Por este motivo, numerosos candidatos a la presidencia han mostrado su preocupación hacia el tema. 

Al respecto, la precandidata por los demócratas, Hillary Clinton, declaró hoy que la solución más certera sería crear un programa federal que ayude a los estudiantes a pagar sus matrículas de los centros públicos sin necesidad de acudir a un préstamo:

“Quiero que la universidad sea asequible. La educación superior debería ser un derecho, no un privilegio para aquellos que pueden pagarla”.

En el video de campaña que la muestra ratificando estas ideas, se citan algunos ejemplos de estudiantes que pagan 64 mil dólares al año, deben 149 mil al momento de graduarse y pagan préstamos con intereses del 9%. Asimismo invierten al menos el 27% de su primer sueldo en devolver los créditos. 

La deuda estudiantil

La deuda de los estudiantes se ha triplicado en los últimos diez años debido al aumento del precio de las matrículas en un 40%. Los especialistas argumentan que dicho incremento se debe a los recortes de presupuesto en el sector educación, lo que ha hecho que las universidades suban las matrículas para poder cubrir sus necesidades. 

Actualmente, según el Centro Pew de Investigación, nada menos que 43 millones de estadounidenses deben una parte sustanciosa de su educación. Esta porción de la población correspende al 37% de los hogares con adultos menores de 40 años.  

La propuesta

Clinton plantea la posibilidad de una inversión de 350 mil millones de dólares durante diez años para cubrir el costo de la educación superior en las instituciones públicas. La propuesta es muy similar a la de otros candidatos, lo que visibiliza una intención general de resolver este preocupante problema que es la causa de que los estadounidenses estén retrasando la edad en la que abandonan la casa de sus padres. 

A cambio del dinero, los estados deben anular los recortes presupuestarios en educación superior y aumentar la inversión en el sector. Asimismo, las universidades deben comprometerse a realizar un programa de control del gasto. 

Las críticas

Marco Rubio, senador republicano, acusa a Clinton de proponer lo mismo que siempre hace la izquierda: financiar un plan federal mediante impuestos a las rentas más ricas, favoreciendo un sistema que ya no funciona (el universitario):

“Este plan encarece la actividad empresarial al aumentar los impuestos para después arrojar ese dinero en un sistema educativo caducado”.

La propuesta de Rubio, incluye permitir que los inversionistas privados financien la educación de los universitarios a cambio de un porcentaje de su futuro sueldo. 

El público

Con esta iniciativa Clinton intenta capturar a los votantes más jóvenes. Es de esta manera que la demócrata intenta mantener la mayor parte del electorado que estuvo presente en las victorias de Obama.

(Foto de cabecera: theodysseyonline.com)