Aunque sus contactos con políticos peruanos siguen sorprendiendo a propios y extraños, Zaida Sisson asegura que su patrimonio no se ha incrementado y que tiene una “vida sencilla” pese a estar implicada en el caso de corrupción de Brasil conocido como 'Lava Jato'.
“No tenemos nada. Mucha gente me mira de otro lado porque tenemos una vida sencilla. Tenemos deudas con los bancos”.
Con estas palabras, la consultora brasileña no solo confirmó en entrevista con Perú21 sus reuniones con el exmandatario Alan García y algunos funcionarios de su segundo gobierno, sino también con Ollanta Humala y su esposa, Nadine Heredia, antes y después de la anterior campaña presidencial.
Pese a que inicialmente había negado rotundamente haber tenido contacto alguno con la actual pareja presidencial, Sisson se rectificó e indicó que la primera vez que se reunió con ellos fue “dos o tres días antes de las elecciones (de 2011)” en su local partidario de la avenida Arequipa:
“(Aquella vez) conocí al señor Salomón Lerner (Ghitis) y a un señor (Omar) Chehade. (…) La señora Nadine (Heredia) entró en la sala y nos la presentaron”.
Sisson indicó que no volvió a ver al jefe de Estado sino hasta tres años después durante una ceremonia oficial en Palacio de Gobierno -conocida como el 'besamanos'-, donde ambos incluso llegaron a tomarse un ‘selfie’, e insistió que jamás trató de temas empresariales con él.
Y sobre sus encuentros con el expresidente Alan García, Zaida Sisson dijo que fueron unas “dos veces, pero con empresas” en Palacio de Gobierno. “Nunca me reuní con el presidente sola”, añadió, pese a que su nombre figura muchas veces más en los registros de visitas de la sede del Ejecutivo.
Más que luces, el caso Lava Jato, la mayor investigación de corrupción en la historia de Brasil y que ha salpicado a los tres últimos gobiernos del Perú, sigue dejando muchos cabos sueltos por atar.
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Foto de cabecera: La República