Tras el ataque de este sábado 14 de febrero contra una reunión acerca de la libertad de expresión en Copenhague, el artista y teórico del arte Lars Vilks ha tenido que abandonar su hogar en Höganäs (Suecia). Ahora, está escondido bajo secreto policial. El supuesto autor del ataque, Omar el Husein, era un joven musulmán de 22 años con antecedentes criminales (por ejemplo, en 2013 apuñaló a un pasajero de tren con un cuchillo).

Esta no es la primera vez que la vida de Vilks se encuentra en peligro y bajo la mira de extremistas islámicos. En agosto de 2007, un dibujo de Vilks representando a Mahoma en forma de perro callejero fue publicada en el diario sueco Nerikes Allehanda. A partir de su publicación, hubieron intensas manifestaciones en Suecia y varios gobiernos de países islámicos, como Irán, Pakistán y Egipto, manifestaron su desacuerdo.

representación de mahoma como perro

El mismo año, Vilks empezó a recibir amenazas de muerte, y se incendió una de sus obras en la calle. Además, el Estado Islámico de Iraq ofreció una suma de 100 mil dólares americanos por su cabeza, y 150 mil si era ‘sacrificado como un cordero’. Desde entonces, y hasta ahora, Vilks cuenta con seguridad policial.

En 2010, fueron arrestados en Irlanda siete personas que presumiblemente planeaban asesinar a Vilks. Además, minutos antes de la explosión de dos bombas en el centro de Estocolmo, el Servicio de Seguridad Sueco recibió un e-mail que anunciaba el ataque y mencionaba la presencia de tropas en Afganistán y los dibujos de Vilks.

esculturas de vilks en suecia

En 2013, tanto Vilks como Stéphane ‘Charb’ Charbonnier fueron agregados a la lista de más buscados de Al-Qaeda. Ahora, en enero de 2015, Charbonnier murió en un ataque contra la oficina de la revista que dirigía, Charlie Hebdo, y Vilks fue, probablemente, el objetivo del ataque de Copenhague.



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