En la cultura pop internacional –más que internacional, estadounidense–, este fue un año marcado, básicamente, por la desnudez. LaMula.pe te ofrece un pequeño análisis de tres hitos que convirtieron el año del selfie en el año del cuerpo.
Nicki Minaj (4 de agosto)
"Oh my gosh, look at her butt". Esta es la frase casi escandalizada que ambienta el single Anaconda, del álbum The Pinkprint. Nicki Minaj mira a la cámara mientras sacude sus extraordinariamente redondos glúteos. El espectador también lo siente: "Dios mío, mira su trasero", y recuerda (si tiene la edad) Baby's got back, de Sir Mix A Lot.
El espectáculo del video roza con la vulgaridad, pero revela una especie de libertad del cuerpo femenino, le quita el tabú a una sexualidad que también puede manipular a los demás (véase 3:23, cuando Minaj prácticamente tortura a un indefenso Drake). En un año tan marcado por la lucha contra el acoso callejero y la cultura de violación, en la que las autoridades les dicen a las mujeres que usen más ropa para evitar la agresión sexual, Nicki Minaj exhibe su cuerpo y muestra que no gastó quién sabe cuánto dinero en implantes para tenerlos guardados.
Obviamente, a las flacas solo nos queda ofendernos o parecernos más a Ellen Degeneres y hacer parodias. La verdad es que es difícil no mirar el video con –al menos– la misma fascinación confundida que las muchachas que introducen el video de Sir Mix A Lot.
Jennifer Lawrence (31 de agosto)
Aunque no fue la única víctima, sí fue la más visible, y la filtración de fotografías privadas de Jennifer Lawrence (y casi 100 otras celebridades y deportistas) armó gran revuelo en las redes sociales. El incidente demostró no solo la fragilidad de los servicios de almacenamiento web sino también la inmadurez y falta de respeto por las personas que aun tienen muchos usuarios del internet.
A diferencia de la auto-exposición de Nicki Minaj, Jennifer Lawrence y compañía no tuvieron ninguna intención de mostrar al gran público sus cuerpos desnudos. En ocasiones como esta, se comprende la vulnerabilidad que representa la fama y cómo, a pesar de andar con dos guardaespaldas, las agresiones están a flor de piel, especialmente en el anonimato del internet.
Kim Kardashian (11 de noviembre)
Por último, Kim Kardashian quiso romper el internet con una sesión de fotos publicada en la revista Paper. En las fotos, Kardashian se quita progresivamente el vestido de fiesta negro –probablemente empapado en champán– delante del fotógrafo Jean-Paul Goude. La fotografía de portada imita una previa de Goude. A la vez, ambas parecen inspiradas en una tradición de exhibición de mujeres africanas del siglo XVII.
A pesar de esta inspiración en una tradición obviamente racista, que puede ser más o menos consciente por parte del fotógrafo y de Kardashian, la sesión demuestra que Minaj tenía razón: la tendencia actual es de apertura a la corporalidad y la desnudez –por ahora, de las celebridades, que son la aristocracia del siglo XXI y pueden contratar guardaespaldas y agentes de imagen–.
Sin embargo, el intento de Kardashian no consiguió su objetivo: el internet no se rompió, y ni siquiera consiguió vencer a Minaj en las búsquedas por Google que contenían su nombre y la palabra "ass" o "butt":
Lo cierto es que, a pesar de que Kardashian cree que equilibrar una copa sobre sus glúteos es talento suficiente para justificar su inmensa fama, es evidente que su control sobre la sesión y la fuente que la inspira es más bien débil. Así, y por falta de transparencia, su mensaje se ve manchado por una tradición en la que la mujer es expuesta por el hombre.
Nicki Minaj, en cambio, ha conseguido marcar una tendencia con base explícita en unas raíces raperas de dudoso contenido de género, pero transformándolas en una postura en la que la mujer tiene el control sobre su cuerpo. Es esta tendencia la que quizá permita que la desnudez deje de ser una amenaza o un secreto que Jennifer Lawrence tiene que guardar bajo siete llaves para que no se lo roben.
Desnúdese el que quiera.
Notas relacionadas en lamula.pe:
2014: 7 videoclips que debes ver
Nicki Minaj, la Celia Cruz posmoderna
Beyoncé te da algunas lecciones de vida
La nube es dueña de toda nuestra información