Hermanar la obra de Salvador Dalí, una de las figuras más notorias del movimiento surrealista, con la Divina Comedia de Dante Alighieri pareceen principio una idea bastante acertada. A la luz de esta muestra, se revela como una verdadera genialidad. 

La ilustración de la Divina Comedia fue un encargo del Gobierno italiano con motivo del 700 aniversario del nacimiento de Dante. Debido a la polémica que desató la elección de un artista no italiano, el proyecto original fue descartado, pero aún así entre 1960 y 1964 Dalí realizó más de cien acuarelas, divididas en tres series correspondientes a cada sección del clásico: el Infierno, el Purgatorio y el Cielo.

INFIERNO Canto I - Comienzo del largo viaje / Colección FUNIBER - difusión.

Aunque el proyecto original con encargo del Estado italiano no se concretó, se editó en Italia un libro con las ilustraciones y, por solicitud del papa Pio XII, Dalí abordó el proyecto de recreación de la serie en xilografía auspiciada por Joseph Foret. Foret y los grabadores en madera Jacquet y Taricco, se dedicaron al laborioso proceso de transferir las acuarelas originales a 3.500 tacos xilográficos, uno por cada color y alrededor de 35 para cada acuarela.

PURGATORIO Canto 17 - Saliendo del cerco de la Ira /  COLECCIÓN FUNIBER - DIFUSIÓN.

El número de artistas que han emprendido la tarea de ilustrar la Divina Comedia es grande: basta mencionar a Botticelli, Miguel Ángel y Gustave Doré. Luego de recorrer la muestra, se hace inevitable afirmar que ninguno de los anteriores propone una aproximación tan personal y a la vez tan universal como la que presenta Dalí. Si bien el artista no abandona las obsesiones recurrentes de su obra, el trabajo al servicio de una narrativa ajena permite reencontrarnos con ciertas virtudes que la exaltación de su excéntrica personalidad usualmente encubre dentro de su obra más conocida.

INFIERNO Canto 27 - Un Diablo lógico /  COLECCIÓN FUNIBER - DIFUSIÓN.

Dalí no deja de ser Dalí. Sin embargo, su capacidad para el dibujo y la composición se lucen aquí de forma inusual. Su habilidad para desentrañar el simbolismo cristiano de Dante, al tiempo que lo enlazan con su universo personal revindican a Dalí como una de las figuras centrales del arte del siglo XX.

INFIERNO Canto 33 - Los Traidores a sus amigos / COLECCIÓN FUNIBER - DIFUSIÓN.

Esta es una muestra especialmente exigente. Es inútil plantearse un recorrido ligero por las 100 xilografías; hay que dedicar tiempo a adentrarse en el completo universo que conforma la serie. Si Dante viaja de la mano de Virgilo en su recorrido por la vida después de la muerte, Dalí es el perfecto compañero para entregarnos, sin resistencias, a ese viaje. 



La Divina comedia ilustrada por Salvador Dalí va hasta el 7 de febrero en el Centro Cultural Inca Garcilaso [Jr. Ucayali 391, Cercado de Lima], de martes a viernes de 10 am. a 8 pm. / Sábados, domingos y feriados de 10 am. a 6 pm.
El ingreso es libre.


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