A cuatro años de prisión suspendida fue condenado hoy Carlos Rivas Urteaga por haber vendido de manera ilegal un paquete de acciones de la azucarera Andahuasi (valorizados en S/. 49’422,573) a Erasmo Wong Lu Vega y Efraín Wong Lu Vega. Esta venta constituye un delito de fraude en la administración de personas jurídicas. El juez, además, dictaminó que el sentenciado pague una indemnización de S./ 400,000 soles y devuelva lo defraudado. Una sentencia similar recibió Eduardo Nuñez Cámara (hasta hace poco reo contumaz), otro de los implicados, el día de ayer.
El fallo reafirma que, efectivamente, hubo delito en la mencionada venta y que esta afectó el patrimonio de la empresa Andahuasi. Además, cabe mencionar que en este tipo de delitos tanto el vendedor como los compradores (en este caso, los hermanos Wong) sabían perfectamente que la operación era ilegal. Así, la sentencia deberá ser tomada en cuenta por la 2ª Sala Penal para Reos Libres, que tiene al voto la decisión de abrir instrucción penal por delito de estafa contra los hermanos Wong, Antonio Palacios Tejada, Enrique Sphilmann Denegri (ex gerente de SCOTIA SAB), Elizabeth Bernal Vento y Edelmira Cobeñas Aquino. Todos ellos estarían involucrados en la irregular compra de acciones.
Del mismo modo, la sentencia trae abajo los argumentos de Rivas y Nuñez y de sus socios, los hermanos Wong, quienes siempre sostuvieron que la venta, realizada el 14 de mayo del 2009, fue perfectamente legal. Así, la actuación de jueces y fiscales que admitieron denuncias y demandas a favor del Grupo Wong resulta sospechosa. De igual manera, es una llamado de atención para la Superintendencia de Mercados de Valores que no se habría percatado de lo irregular de la operación.
El caso Andahuasi
El caso de la compra irregular de un paquete de acciones de la empresa azucarera Andahuasi saltó a las primeras planas cuando se hizo pública una reunión entre ex vicepresidente de la República, Omar Chehade, su hermano Miguel, y tres generales de la Policía Nacional: Abel Gamarra, Raúl Salazar y Guillermo Arteta.
En esa reunión, el miembro de la bancada oficialista quiso utilizar sus influencias para 'agilizar' el desalojo (a favor de grupo Wong) de los trabajadores de la Azucarera Andahuasi que se habían atrincherado desde el 2009. Más aún, se acusó a Miguel Chehade de ofrecerle dádivas económicas y hasta un ascenso por su colaboración, justamente, al general Arteta. Esta acusación fue encontrada verídica por el Poder Judicial ya que lo condenó por tráfico de infuencias a tres años de prisión efectiva.
A partir de ahí, diversos medios investigaron sobre la venta irregular de acciones de la Azucera Andahuasi. Ideele, por ejemplo, realizó una municiosa investigación.