Ya se veía venir. La constante defensa de Heriberto Benítez al presidente regional de Áncash, César Álvarez, eran señal de vínculos entre ambos.

Pero, lo más grave, eran las acusaciones contra el parlamentario que señalaban que él obstruyó una diligencia fiscal en un lugar donde se realizaban interceptaciones telefónicas a los opositores al gobierno regional de Áncash. Se trata del caso llamado "La Centralita".

El lunes, la Comisión de Ética del Congreso de la República acordó abrir investigación al parlamentario Benítez por este caso, informa Andina. Esta Comisión aprobó por unanimidad la recomendación de su Secretaría Técnica de investigar al congresista de Solidaridad Nacional por impedir la inspección fiscal pese a que existía una orden judicial.

La denuncia la hizo el parlamentario Modesto Julca el pasado 14 de abril. En ese momento, señaló que el congresista Benítez infringió cuatro artículos del Código de Ética y tendría responsabilidad en delitos penales al haber "interferido e intentado impedir" las investigaciones a Álvarez.

En su defensa, Benítez dijo que no impidió la intervención de los fiscales, pero reconoció que los denunció porque allanaron ilegalmente su domicilio, ubicado en el mismo edificio donde se ubica La Centralita.

Como se recuerda, el presidente regional de Áncash está impedido de salir del país por cuatro meses, que cuentan desde abril de este año, luego de un fallo del Tercer Juzgado de Investigación Preparatoria de la Corte Judicial de El Santa. A Álvarez se le acusa de corrupción y sicariato político.

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