Así va la publicidad de la "Marcha por la Vida", organizada por el Arzobispado de Lima: la figura de una mujer embarazada, sonriente, interpela a tu "niño interior", le pide que defiendas al hijo que lleva dentro. ¿Cuál es la amenaza de la que hay que defender a esta mujer? ¿Podrías identificar qué, quién la amenaza? 

La campaña publicitaria de la marcha es reactiva frente a los sectores civiles que se muestran a favor de despenalizar el aborto. Y lo hacen satanizandolos, sugiriendo que ellos atentan contra las mujeres embarazadas que han decidido gestar a sus futuros hijos.

El Estudio para la defensa de los derechos de la mujer-DEMUS, consideró esta imagen, a través de su cuenta en Twitter, como una forma de "manipulación": quieren hacernos creer algo que no es.

Es obvia la intención de esta estrategia. Esto es lo que nos dice la comunicadora Raisa Ferrer:  

"Lo que yo entiendo al ver el afiche es que la mujer embarazada está en un contexto en el que su futuro hijo peligra, pues alguien le quiere hacer daño en el presente y ella pide que otros lo defiendan. Sin embargo, la despenalización del aborto a la cual estos actores sociales se oponen no afecta a las mujeres embarazadas que sí desean a sus hijos, sino únicamente a aquellas que no. Si la intención de la campaña era visibilizar que somos una sociedad heterogénea y existen ciudadanos que no están a favor de la despenalización, este no es el camino"

Tal como se indica en su página web, la marcha del sábado 22 de marzo se autodefine como  "la mayor manifestación del Perú en favor de la vida desde la concepción hasta su fin natural". Su misión: "Informar y educar a la población sobre el valor de la vida humana desde su inicio más temprano hasta la muerte natural".

Son sectores bastantes conservadores los que auspician y facilitan esta marcha. Para la directora ejecutiva del MHOL, Vero Ferrari, esta marcha tendrá como aliados a "los partidos más conservadores, homofóbicos, clasistas y racistas, con las empresas que más han lucrado, y con medios de comunicación que son operadores del atraso y la colonialidad en la que seguimos viviendo". Fuerte.

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