Ya con la investigación de la fiscalía sobre el caso Odebrecht respirándole en la nuca, el expresidente Alan García decidió pronunciarse a través de sus redes sociales, luego de haber rechazado hacerlo ante los medios, sobre las nuevas revelaciones de los pagos ilegales con dinero de la Caja 2 de la constructora brasileña a personajes de su entera confianza y de su entorno más cercano.
En Twitter, esta vez el exlíder aprista optó por emitir un mensaje escueto y cauto, a diferencia de otras veces en que responder con virulencia, arremetiendo contra el mensajero o denunciante.
Por su lado, Luis Nava Guibert, ex secretario personal de García durante su último gobierno, amenazó con demandar a IDL-Reporteros, por revelar que Odebrecht le depositó más de US$ 4 millones en la cuenta en Andorra del empresario Miguel Atala, otro amigo íntimo del expresidente aprista, y del consorcio IIRSA Sur, mientras que su hijo, José Antonio Nava Mendiola, recibió otros US$ 471 mil, de acuerdo con información que la constructora brasileña entregó a las autoridades peruanas.“Nunca he recibido dinero ni forma directa o indirecta de la empresa Odebrecht. Hoy estoy procediendo a poner una denunciar contra IDL-Reporteros”, insistió en negar este lunes en RPP Nava Guibert, pese a las evidencias documentales en poder de la fiscalía.
Por ello, el exsecretario de García sabe lo que se le viene ahora: su muy probable detención. De hecho, ya un pedido de impedimento de salida del país, que se evaluará este mismo lunes, pero ante las nuevas revelaciones, es probable que la fiscalía solicite otras medidas más restrictivas.
“Preocupa (que puedan pedir una detención), sí, porque lo apartan a uno de la familia […] Esas detenciones preventivas se prestan a abusos, se prestan a atropellos. Entonces, si me detienen, me detienen pues, aquí estoy”.
“¿Cómo puedo haberle pedido dinero a Odebrecht si yo no he tenido un cargo ejecutivo? Yo he sido un secretario general de Palacio de Gobierno que lo único que administraba eran las sumas pequeñas del mantenimiento de Palacio”, alegó Luis Nava en otro momento, con lo que refuerza las sospechas de la fiscalía, en el sentido de que el dinero que le depositó Odebrecht no era para él, que solo habría fungido de testaferro.
“No tenía injerencia en ningún ministerio. Yo no tengo injerencia en ningún ministerio donde trabajan empresas brasileñas en que pueda llamarlos y decirles ‘dame trabajo, dame plata’, porque yo no tengo esa facultad de decisión”.
Defiende a ‘bandido’
De otro lado, Luis Nava se refirió a la situación de su hijo, José Antonio Nava Mendiola, quien también recibió dinero sucio de Odebrecht: fueron US$ 471 mil bajo el apelativo de ‘bandido’ en el esquema de sobornos de la constructora.
El exsecretario aprista dijo que su hijo viajó a EEUU el último miércoles, el mismo día en que la fiscalía solicitó su impedimento de salida del país, para hacerse un tratamiento a la vista, pero que no sabe cuándo regresará.
“Jose Antonio había viajado el miércoles 10 en la noche, no tenía conocimiento del impedimento de salida sino no se hubiese ido. Tiene su pasaje de vuelta”, alegó
Nava Mendiola, gerente de Transportes Don Reyna, empresa que contrató con Odebrecht por US$ 24 millones durante el último gobierno aprista, mediante un comunicado, dijo que cuando viajó no había sido notificado y precisó que tiene comprado su pasaje de vuelta. "Mi boleto de retorno a Lima es para el 7 de mayo. Mis abogados tienen la documentación sustentatoria del hospital y mi historial médico", señaló.
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