Su llegada a la 'U' generó más risas que certezas. Y cuando ya había sido bautizado como 'Roberto Challe, el breve' tras anunciar que dejada el club 48 horas después de haber sido presentado como DT porque lo querían pesetear, el exmundiaista arregló con la administración temporal sus diferencias económicas, y firmó como entrenador hasta diciembre.

Lo de Challe no fue una novela, fue una comedia (de mal gusto, claro) que tuvo final sui generis, aunque no tanto para un fútbol chicha como el peruano.

Después de quejarse públicamente que la directiva de Universitario le quería pagar muy poco y que por eso no iba a continuar, este sábado el ex ‘Niño terrible’  fue a la sede del club en Ate pero no lo dejaron entrar.

Al final, Challe tuvo que hacer un acto de contrición para volver al cargo que había anunciado que dejaba, confirmó gerente deportivo Germán Leguía. "Ya Robertito firmó", dijo en RPP.

El otro Leguía, Raúl, quien funge de administrador del club, informó que Chale se queda hasta el final del Clausura, y que hubo una mejora económica en el contrato que firmó.

Según trascendió, Challe ganará el triple de lo que le ofrecieron antes del partido contra Alianza Atlético Sullana. Al parecer, sí lo quisieron pesetear.

Ya con el contrato firmado, oleado y sacramentado, Challe habló:  "Hubo una confusión. Yo nunca renuncié porque nunca firmé contrato. Hubo dudas que Germán (Leguía) ya me las aclaró. He agraviado al club con lo que dije, pero me quieren y me darán una oportunidad para salir campeón", dijo en rueda de prensa.

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