Repudiable blindaje. La Comisión de Ética Parlamentaria decidió no investigar la denuncia contra el congresista Luis Gustavo Cordero Jon Tay por actos de violencia y acoso sexual en contra de su expareja. La iniciativa de indagación fue desestimada por cinco votos en contra, seis abstenciones y dos a favor. Votaron en contra los parlamentarios Mery Infantes, Jorge Morante, Juan Lizarzaburo y Karol Paredes, esta última presidenta de la comisión. 

Este domingo, el dominical Panorama difundió el testimonio de una mujer que mantiene su identidad en reserva y que afirma que fue agredida por Cordero Jon Tay cuando eran pareja. Según su relato, el ahora parlamentario la golpeó en reiteradas ocasiones, incluso con patadas en el cuerpo.

Incluso relató que el fujimorista publicó en internet un video íntimo de ella sin su consentimiento. ”Él me pateó incluso en la garganta; no podía hablar dos días. Una patada tan fuerte o más fuerte me pudo haber roto la tráquea. Yo nunca me retracté de esa denuncia”, comentó la expareja del congresista a Panorama.

Además, denunció que a través de un emisario, el congresista de Fuerza Popular ha ofrecido pagarle los sueldos de siete años por un trabajo no remunerado que hizo para Cordero Jon Tay, a cambio de que no diga nada a la prensa sobre las agresiones. Según su relato, el emisario trató de atemorizarla con el argumento de que el parlamentario integra la Comisión de Inteligencia del Congreso, lo que sería peligroso para ella.

Durante la sesión de la comisión, se alegó que los hechos ocurrieron hace mucho tiempo y que, además, el código de ética parlamentaria se aplica a los congresistas en actividad. De esta manera fundamentó su posición el legislador de Fuerza Popular Jorge Morante Figari, quien insistió en que la agresión de su colega de bancada sucedió siete años antes de que asuma sus funciones. “Creo que estamos entrando a un ambiente totalmente ajeno a nuestra comisión”, añadió.

Por su parte, la congresista Ruth Luque (Juntos por el Perú), quien solicitó la investigación, señaló que estando en función el congresista Cordero habría enviado una persona a la víctima para ofrecer el pago de siete sueldos con el propósito de que no entregue su testimonio y que, incluso, la amenazó. “Se trata de violencia que se dio en esa época, pero que se ha mantenido en el tiempo, como se ha evidenciado en el reportaje de Panorama”, replicó la parlamentaria.

(Foto: Captura)

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