El Covid-19 no se ha ido y no hay fecha segura para la posible vacuna, pero varios comercios ya volverán a operar, al menos con un aforo de 40%, como en el caso de los restaurantes, uno de los sectores más afectados por la paralización de las actividades económicas. El próximo 20 de julio los restaurantes podrán volver a abrir su puertas a los comensales, de acuerdo al protocolo sanitario publicado este lunes por el Ministerio de la Producción (Produce).

Si bien la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha aclarado que el coronavirus no puede multiplicarse en los alimentos porque necesitan un huésped animal o humano para hacerlo, en los restaurantes se deberían mantener las reglas generales de protección (mascarilla y/o protector facial) y distancia física mínima de 1 metro (lo idóneo es 2 metros según expertos).

Al respecto, el médico infectólogo peruano Juan Villena afirmó, en declaraciones a la agencia Andina, que existe un riesgo moderado cuando las personas acuden a un restaurante, por obvias razones como el que para comer es necesario quitarse la mascarilla y/o el protector facial.

Villena señaló:

"Si la persona que sirve o atiende tiene el Covid-19, me trae el plato, el tenedor o cuchara y yo empiezo a comer, el virus podría quedarse en mi mano. Y si luego me llevo las manos a los ojos, a la nariz o la boca, que estará sin mascarilla, entonces me infectaré".

La recomendación del infectólogo es que las personas que acudan a restaurantes se laven las manos antes de comer, no deben tocarse la cara en ningún momento durante la ingesta de sus alimentos y lavarse las manos nuevamente al terminar. Lo más importante, resalta, es mantener la distancia física con otras personas y no compartir ni vasos ni cubiertos con sus acompañantes.

¿Y cómo hacer para servirse las bebidas? Villena recomienda que solo una persona del grupo debe agarrar la botella y servir a los demás porque, de lo contrario, el virus de un asintomático podría quedarse en el plástico o vidrio, y si alguien sano lo toca y se lleva las manos a la cara, puede terminar contagiado. 

"Si acude una familia, debe haber un máximo de ocho personas y todas separada entre sí. Ninguna debe compartir el vaso de gaseosa o bebida alcohólica. Si se cumple todo lo mencionado, no debería haber problema. Pero el riesgo aumenta cuando se incumplen las recomendaciones de bioseguridad o aforo".

Sobre los cubiertos, el infectólogo dijo que no es necesario que los comensales lleven sus cubiertos al restaurante, pero sí recomendó que los establecimientos deberían entregarlos envueltos en papel o bolsa plástica.  

"Si llevo mi tenedor, también debería llevar mi plato y vaso... eso es imposible. Una vez más, el consumidor debe lavarse las manos antes y después de comer y no tocarse nunca la cara durante su alimentación".

Los comensales deben asegurarse de que las mesas sean desinfectadas antes y después del servicio para reducir el riesgo de contagio con el siguiente cliente.

¿Comer con las manos? Villena responde:

"No pasará nada porque los alimentos irán por el aparato digestivo y por allí no ingresa el virus. En cambio, el covid sí ingresa por las vías respiratorias, por la faringe, la tráquea, los pulmones. Y más bien si alguien come sus alimentos con las manos sucias, lo que podría contraer es una enfermedad gastrointestinal, como una diarrea".

El infectólogo pidió al público no olvidar que el riesgo de contagio es alto cuando se está cerca a otra persona, cuando esta tose, habla fuerte o estornuda, ahí es cuando lanza gotículas de saliva. El riesgo también está presente cuando se toca una superficie donde está el coronavirus y luego se llevan las manos al rostro. Villena recomendó cargar un alcohol en gel portátil para limpiarse las manos, cuando no haya posibilidad de lavarse con agua y jabón.

[Foto de portada: gestion.pe]

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