Hasta hace unas semanas, en Perú y en todo el mundo, solo se daba tratamiento paliativo a los infectados con COVID-19. El sistema inmunológico de cada persona debía luchar contra el virus acompañado de medicinas, como paracetamol, fármaco que destaca por tener propiedades analgésicas y antipiréticas, y se utiliza principalmente para tratar la fiebre, el dolor leve y el moderado.

Este domingo 29 de marzo, el Ministerio de Salud (Minsa) emitió la Resolución Ministerial 139-2020-MINSA, firmada por el ministro Víctor Zamora, que establece un cambio fundamental en los sistemas de tratamiento a las personas afectadas por el coronavirus en el país, informó IDL-Reporteros. 

fuente: idl-reporteros

Según el nuevo “Documento Técnico: Prevención y Atención de personas afectadas por COVID-19 en el Perú”, señalado por la RM 139-2020 como el actual estándar oficial, habrá, por primera vez, protocolos específicos de ataque a la enfermedad, además de los tratamientos paliativos  que se vienen ejecutando desde que inicio la cuarentena el pasado 16 de marzo. 

En la página 15 del “Documento Técnico” desarrolla los “Tratamientos específicos para COVID-19” se señala que, si bien “no hay evidencia actual […] para recomendar tratamientos específicos para pacientes con sospecha o confirmación de infección por el virus", existen numerosos experimentos y aplicaciones de un conjunto de medicamentos, entre los que destaca la hidroxicloroquina y la azitromizina. Ambas medicinas, usadas en conjunto, reúnen el mayor grupo de reportes de éxito en la práctica clínica de emergencia.

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El nuevo protocolo del Minsa solo considera el uso de estos medicamentos en el “manejo de casos moderados y severos (solo pacientes hospitalizados)”, que el Perú suman a las fecha 107 personas. Asimismo, recomienda, de acuerdo con las mejores experiencias reportadas, que estas medicinas no sean usadas en la etapa temprana de la enfermedad. 

Siguiendo los pasos de Francia

El Ministerio de Salud de Francia autorizó el jueves pasado el tratamiento en base a la cloroquina del infectólogo francés Didier Raoult para pacientes con coronavirus que se encuentran hospitalizados. “La hidroxicloroquina y la combinación de lopinavir/ritonavir pueden ser dispensadas y administradas bajo la responsabilidad de un médico a pacientes afectados por COVID-19, en los establecimientos de salud que se encargan de ellos, así como, para la continuación de su tratamiento si su condición lo permite y con la autorización del médico inicial, en el hogar”, señaló la resolución del ministerio. 

“La Agencia Nacional para la Seguridad de Medicamentos y Productos de Salud es responsable de elaborar un protocolo para uso terapéutico destinado a profesionales de la salud y establecer los términos de información adaptados a la atención de pacientes”, agrega.

Tras el anuncio, Raoult, quien en los últimos días estuvo en el centro de la polémica en Francia por defender el tratamiento de COVID-19 con cloroquina, le agradeció en su cuenta de Twitter al ministro de Salud por la decisión tomada para hacer frente al brote. “Como parte de la emergencia de salud, se puede recetar hidroxicloroquina para tratar COVID-19. Gracias Olivier Véran por escuchar”, señaló el científico.

La hidroxicloroquina (derivado de la cloroquina) se ha utilizado durante años en el tratamiento de la malaria. También se sabe que el medicamento bloquea la entrada de muchos virus en las células. Un pequeño ensayo clínico llevado a cabo por investigadores franceses de The Méditerranée Infection University Hospital Institute en Marseilla ha revelado que es eficaz para reducir la carga viral en pacientes con COVID-19 . 

Philippe Gautret y su equipo del Hospital Universitario de Marsella explican que la entrada de virus en las células requiere que las partículas del virus se unan a los receptores de la superficie celular para permitir la liberación del genoma viral en el citoplasma. En muchos casos, después esta unión, llegan a las células a través de la vía endocítica. A medida que estas vesículas se mueven hacia el núcleo, su pH disminuye, lo que cataliza la fusión de las membranas virales y celulares. 

Los resultados de más de 100 pacientes han mostrado que la cloroquina fue superior al control para negativizar el virus y acortar el cuadro clínico, por lo que se ha recomendado su inclusión en las guías de tratamiento del COVID-19 de China. 

El estudio

Durante el estudio –realizado en Francia– se incluyó a 42 pacientes con infección por COVID-19 (virus SARS-CoV-2), de los que 14 fueron tratados con hidroxicloroquina sola, 6 con hidroxicloroquina + azitromicina, frente a 16 controles sin tratamiento. La dosis de hidroxicloroquina fue de 200 mg 3 veces al día durante 10 días; y la de azitromicina, utilizada para prevenir la sobreinfección, 500 mg el primer día, y 250 mg/día durante 4 días. 

A los 6 días de tratamiento la carga viral en secreción nasofaríngea fue negativa en el 57% (8/14) del grupo de hidroxicloroquina, 100% (6/6) del grupo de hidroxicloroquina + azitromicina y en el 12.5% (2/16) del grupo sin tratamiento. Sin embargo, en uno de los pacientes tratados con hidroxicloroquina + azitromicina se volvió a detectar presencia viral al octavo día de tratamiento.

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