En el Perú las comunidades campesinas y nativas se ubican principalmente, en las zonas rurales andinas y amazónicas. La mayoría carece de un establecimiento de salud en sus territorios. De hecho, de cada 10 comunidades indígenas existentes en nuestro país, menos de cuatro cuentan con un centro de salud, por lo que si se contagian del coronavirus su vulnerabilidad sería mucho mayor.  

El surgimiento e incremento de casos de contagio por el COVID-19 en regiones como Madre de Dios y Loreto ha originado gran preocupación entre los pueblos indígenas. En el caso de las comunidades amazónicas, estas han tomado medidas como impedir el ingreso de gente extraña a sus territorios, al igual que las sociedades originarias de otros países. Pero hay que hacer mucho más.

Recientemente la Defensoría del Pueblo ha pedido a los ministerios del Interior y de Defensa que garanticen la presencia suficiente de personal policial y militar en las regiones donde existe mayor predominancia de población indígena, a fin de evitar que este sector de la población peruana se vea afectado por la propagación de este virus, debido a su alta vulnerabilidad.

Para hablar de ello conversamos con Nelly Aedo Rueda, jefa del Programa de Pueblos Indígenas de la Defensoría del Pueblo. 



(Foto: Renato Pita)


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