Hasta que se pronunció. Luego de días de protestas, que incluyeron la toma del campus universitario por parte de los alumnos de San Marcos que se oponen al bypass, el alcalde de Lima, Jorge Muñoz, anunció este jueves que ya no construirá la cuestionada oreja vial en cruce de las avenidas Venezuela y Universitaria, donde se ubica la sede de la casa de estudios, tal como se había comprometido durante su campaña electoral.
En la víspera, la Municipalidad de Lima anunció que viene trabajando en una propuesta técnica para atender la solución de una obra pendiente hace 11 años.
Este jueves, en un comunicado dirigido a los vecinos de Lima, vía Twitter, Muñoz dijo que es respetuoso de sus compromisos que asume y tal como suscribió el año pasado, "plantearemos una solución para terminar esta obra".
El burgomaestre indicó sí se hará el cerco perimétrico, pero coordinado con la comunidad universitaria, pero no dónde se construirá el muro, en un contexto en que uno de los mayores reclamos de los estudiantes esa estructura recortaría 9.500 metros cuadrados del campus.
"Tal como lo dije en la Ciudad Universitaria el año pasado, plantearemos una solución para terminar esta obra que viene afectando a generaciones de estudiantes sanmarquinos y que han ingresado, estudiado y se han graduado con su campus expuesto, con la obra inconclusa e insegura".
La máxima autoridad metropolitana también garantizó beneficios para la decana de América, como contar con una estación de la Línea 2 del Metro, para que sirva a la comunidad universitaria como en las grandes ciudades del mundo.
Sea como fuere, el cuestionado bypass entre Venezuela y Universitaria, una zona que colinda con la universidad, no tenía sentido ni iba a solucionar el problema del tráfico en la zona, según explicaron expertos.
Como ya se ha visto en otros casos, un intercambio vial no soluciona el tráfico y además genera un espacio de riesgo para la seguridad ciudadana y favorable para la contaminación ambiental, a un costo muy alto. Es decir, por donde se le mire, no era un proyecto funcional. Por ello, la oposición a ese bypass paralizado hace 11 años, cuando el exalcalde Luis Castañeda Lossio lo quiso imponer, pero no lo logró por la tenacidad de la comunidad universitaria.
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