La ley lo prohíbe, pero eso no fue impedimento para que Manuel Elera, esposo de la congresista fujimorista Yeni Vilcatoma, contrate con instituciones del Estado por un monto que bordea los 80 mil soles.
El esposo de Vilcatoma fue un suboficial de la Policía Nacional que se graduó en febrero de 2017 como abogado. Pidió su baja de la institución policial ese mismo mes y tres meses después de terminar sus estudios de Derecho obtuvo su primer contrato con el Estado como "experto en temas legales", según revelo un informe de Latina.
Así, entre mayo y octubre de 2017, Elera prestó servicios, por un monto que supera los 39 mil soles, a la Contraloría General de la República. También contrató con la Municipalidad de Lima, hasta el 10 de julio pasado, por montos que oscilaron entre los 4,000 y los 6,000 soles durante algunos meses.
Según la comuna capitalina, para prestar sus servicios, el esposo de Vilcatoma les presentó una declaración jurada en la que aseguró que no tener impedimento ni estar inhabilitado para contratar con el Estado; es decir, mintió en un documento público, porque las prohibiciones están señaladas en el artículo 11 de la Ley de Contrataciones del Estado.
La norma señala que entre los funcionarios que no pueden contratar con el Estado están los congresistas y sus familiares hasta el cuarto grado de consaguinidad y segundo de afinidad (cónyuge, conviviente, hermanos, cuñados, abuelos, padres, hijos, nietos, tíos y primos hermanos).
Consultada al respecto por Latina, Vilcatoma se limitó a responder que la denuncia periodística es una persecución política. "Esto es un claro acto de persecución", dijo la legisladora fujimorista.
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