Tal como lo habían adelantado en el Ejecutivo, las cifras que este miércoles dio a conocer el INEI confirman que la pobreza en el Perú disminuyó en 2018, luego de que aumentara en 2017, por primera vez en un década. Según los datos oficiales, el indicador pasó de 21.7% a 20.5% el año pasado.
"Ello implica que 313,000 personas dejaron la condición de pobreza el año pasado", dijo el Jefe del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), José García Zanabria, quien destacó que el nivel de pobreza del 2018 (20.5%) es incluso menor que el registrado el 2016 (20.7%).
En el 2017, unos 375 mil peruanos habían vuelto a vivir por debajo de la línea de la pobreza, que se establece en el país bajo un enfoque monetario y se usa el gasto como indicador de bienestar: si una persona subsiste con menos de S/344 al mes, se le considera pobre, según la metodología usada por el INEI para esta medición; es decir, ese es el monto que permitiría cubrir las necesidades básicas alimenticias y no alimenticias en el país, según las autoridades (en el 2017 el monto fijado fue de S/ 338 mensuales).
Ahora bien, si la pobreza bajó en 2018, según los parámetros oficiales, todavía esta condición afecta a más de 6.5 millones de personas en el Perú, que acumula dos décadas de crecimiento económico continuo sin poder reducir la desigualdad.
Para el caso de la pobreza extrema, esta también se redujo el 2018 y bajó de 3.8% a 2.8%, lo que equivale a que 309.000 personas dejaron de ser pobres extremos, aunque esta condición aún afecta a 900.000 personas, quienes viven con menos de S/ 183 al mes.
Pero hay quienes consideran el método para medir la pobreza en el país que usa el INEI no es precisa, por decir lo menos. El economista Farid Matuk, exjefe de esta institución, plantea por ejemplo poner el foco en medir la anemia y la desnutrición, así como por políticas más asertivas para luchar contra estos males.
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