"Creo que es un derecho humano y estamos para que se cumplan (los derechos)". Así respondió la ministra de la Mujer, Gloria Montenegro, al ser consultada por su posición sobre el matrimonio igualitario y la decisión del Poder Judicial a favor de reconocer la unión de la gerente de Fiscalización de la Municipalidad de La Victoria, Susel Paredes, con su esposa Gracia María Francisca Aljovin.
Montenegro consideró que todas las personas tienen derecho a ser felices y que se debe tolerar las diferencias. En ese sentido, afirmó que las resoluciones del ente de justicia están para cumplirse. "Nos merecen el mayor de los respetos, tenemos que velar por un país justo, equitativo e igualitario", declaró en entrevista a Cuarto Poder.
En la vereda de enfrente -como era de esperarse- está la congresista de la bancada de Fuerza Popular Tammar Arimborgo, quien rechazó el fallo del Poder Judicial, que ordena al Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec) avalar el matrimonio de Susel Paredes. En esa línea, la fujimorista solicitó al Reniec que apele el mandato judicial de primera instancia, para que no se concrete la unión civil entre ambas mujeres.
“Discrepo totalmente con usted, nuestra Constitución Política y Código Civil son claros: matrimonio es la unión voluntariamente concertada entre varón y mujer”, tuiteó Arimborgo, al señalar que no caben “interpretaciones” ni imposiciones internacionales de la agenda de género. Reniec debe apelar”, aseguró.
Enfoque de género
La titular del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables también respaldó la decisión del Poder Judicial que declaró infundada la demanda contra el enfoque de género en el Currículo Nacional de Educación Básica porque permitirá contar con una herramienta para crear una cultura de respeto y promover la igualdad entre hombres y mujeres.
“Es sumamente importante porque no se puede trabajar la parte preventiva si educar(...) tenemos que vernos como iguales, respetarnos. La única forma es considerar en la malla curricular cursos graduales. La importancia de la educación sexual va tomando cuerpo", resaltó la ministra al indicar que actualmente la tasa de embarazos en adolescentes en el área rural alcanza el 30%.
Arimborgo, en cambio, presentó en enero de este año el Proyecto de Ley (PL) 3795 que tiene como objetivo excluir la “ideología de género” de las políticas públicas dirigidas a niños y adolescentes. La propuesta indica que "la imposición del enfoque de género ha ocasionado grave daño a la niñez y juventud induciéndoles a tener disforia de la identidad sexual [...] y eso provoca cambios indeseados de sexo biológico, alteración grave de la personalidad entre otros efectos negativos como el sida y cáncer".
(Foto de cabecera: Composición)
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