El último jueves, José Enrique Escardó, una de las víctimas del Sodalicio, alertó que uno de sus abusadores estaba al mando de un colegio y tenía contacto con menores. Se trataba de Alfredo Draxl quien fue designado director del Liceo Naval Almirante Guise de San Borja.
Escardó mostró su indignación, considerando que se trata de una persona acusada de graves hechos, como abusos físicos y psicológicos contra menores.
Precisamente un día antes de esta alerta, Draxl estuvo en el Congreso, declarando ante la Comisión de Abusos Sexuales contra Menores de Edad, presidida por el congresista Alberto de Belaunde.
En dicha sesión, Draxl terminó reconociendo haber cometido una serie de acciones, que coinciden con lo narrado por Escardó, como obligar a dormir en las escaleras o amenazar con una navaja en el cuello.
Ante esta preocupante situación (que un acusado de abusos físicos y psicológicos contra menores sea director de un colegio), el Ministerio de Educación (Minedu) reaccionó de la siguiente manera: dijo no ser responsable de la designación de Draxl, sino que era responsabilidad de la Marina de Guerra, y pidió al Poder Judicial que se informe que existía una sentencia condenatoria sobre el caso contra el director. Ninguna de estos dos anuncios resolvía el asunto: solo se ejercía presión sobre otra institución y se pedía una sentencia que no existe, porque el proceso está aún en investigación (pero sí es una persona acusada y que incluso, como vimos anteriormente, ha reconocido haber cometido esos actos).
La indignación de Escardó aumentó y su alerta llegó hasta los padres y madres de familia del Liceo Naval, que se manifestaron y pidieron que Draxl sea retirado del cargo. Ante estas presiones, el Minedu tomó otras medidas más efectivas: la ministra de Educación, Flor Pablo, se comunicó con el ministro de Defensa, José Huerta, para pedirle que Draxl deje de ser director de dicha institución educativa.
Finalmente, se logró que Alfredo Draxl, acusado de abusos físicos y psicológicos contra adolescentes del grupo católico Sodalicio, presentara su renuncia al cargo de director del colegio Liceo Naval Almirante Guise, lo cual fue comunicado de manera oficial por la Marina de Guerra del Perú.
José Enrique Escardó saludó esta noticia y pidió que los ciudadanos sigan organizándose en defensa de la salud física y psicológica de niños, adolescentes, jóvenes y de personas vulnerables.
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