En el caso de Alan García, el fallido asilo diplomático que Uruguay le negó —ya que no se trata de un perseguido político com alega si no de un simple investigado por corrupción— le da a la fiscalía argumentos más sólidos para alegar que hay peligro procesal la investigaciones contra el expresidente, coincidieron especialistas.
Aunque las pesquisas contra el líder aprista por la trama corrupta de Odebrecht en el Metro de Lima está en etapa preliminar, la actitud de García evidencia un ánimo de querer evadir la acción de la justicia o intento de fuga usando sus conexiones políticas, consideró el abogado Jorge Paredes, especialista en derecho penal.
"El fiscal tiene ahora un caso más sólido respecto al peligro procesal, alegará que (García) no tiene arraigo, tiene al hijo y la pareja en España, no tiene residencia habitual, no tiene otros lazos y sus hijos son mayores", dijo en RPP.
Explicó que el denominado riesgo procesal —peligro de fuga o de obstaculización de la justicia— es uno de los criterios que los jueces evalúan al momento de considerar si declara fundado o infundado un pedido de prisión preventiva trde la Fiscalía.
Para el exprocurador Luis Vargas Valdivia es obvio que Alan García está buscando evitar seguir en el país y cumplir la orden de impedimento de salida, lo que podría considerarse como peligro de fuga. "Uruguay, los embajadores de Estados Unidos y la Unión Europea señalaron que no se dan los supuestos para el asilo. En el Perú, hay estado de derecho. (Alan) García trató de usar indebidamente un instrumento internacional para salir del país", dijo en El Comercio.
En el ello coincidió el abogado penalista Luis Lamas Puccio, quien dijo que García quiso usar la figura de un perseguido político para evadir una acción de carácter judicial. "El tema de que es un perseguido político está tratando de utilizarlo y capitalizarlo al máximo. Es una forma de entorpecer (la justicia). Con mayor razón lo señala Uruguay", anotó.
El exprocurador Iván Montoya dijo que aunque García y sus escuderos dirán que el pedido de asilo es parte de su derecho y no puede contar como riesgo es válido afirmar también que hay intención de sustraerse a la acción de la justicia. "Y más aun, si se mira retrospectivamente, es indebida, porque no había razones para solicitar el asilo y encima ha sido rechazado. Objetivamente, hay riesgo de fuga", precisó.
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